SRE: México no vive un conflicto armado

La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) señaló que el reporte Armed Conflict Survey 2017 (ACS), publicado por el International Institute for Strategic Studies (IISS), utiliza cifras cuyo origen se desconoce, refleja estimaciones basadas en metodologías inciertas, y aplica términos jurídicos de manera equivocada.
“Sus conclusiones no tienen sustento en el caso de México”, enfatizó la Cancillería, en respuesta a la publicación en la que se ubica a México como el segundo país donde se cometen más asesinatos, después de Siria.
El International Institute for Strategic Studies señala en su reporte, dado a conocer el pasado martes 9 de mayo, que México registró 23 mil decesos el año pasado, siendo sólo superado por la guerra siria, que contabilizó un total de 50 mil muertes y refiere que México concentró 58.9 por ciento de las 39 mil muertes registradas en América Latina.
Al respecto, la Cancillería indicó que el reporte señala de manera irresponsable la existencia de un conflicto armado (no internacional) en México.
“Ello es incorrecto; la existencia de grupos criminales no es un criterio suficiente para hablar de un conflicto armado no internacional. Tampoco lo es el uso de las Fuerzas Armadas para mantener el orden al interior del país.
“En este sentido, el reporte busca dar un tratamiento similar a naciones con fenómenos completamente diferentes, que no son comparables ni medibles entre sí”, destacó la SRE.
La violencia relacionada con el crimen organizado es un fenómeno regional, que va más allá de las fronteras que México comparte con Estados Unidos, Guatemala y Belice, entre muchos otros países, señaló la SRE.
Los retos que México enfrenta en este rubro, añadió, no pueden aislarse de fenómenos relacionados en otras jurisdicciones, como el tráfico de armas y la demanda de drogas.
“El combate al crimen organizado transnacional debe analizarse de manera integral”, indicó.
La estimación total de homicidios dolosos a nivel nacional en 2016 aún no ha sido publicada por el INEGI, por lo que se desconoce el origen de la cifra utilizada en el reporte, mencionó la Cancillería.
“También es inverosímil la suposición que hace el estudio al considerar que todos los homicidios que tuvieron lugar en México están relacionados con el combate a las organizaciones criminales. Ello debido a que las estadísticas de homicidio doloso, como la del INEGI, incluyen casos de muertes por riñas, muertes por armas blancas, muertes asociadas a la comisión de delitos del fuero común, así como aquellas producto de conflictos vecinales o comunitarios, entre otras. En este sentido, el reporte parte de una base errónea y carente de rigor técnico”, expresó la SRE.
El ranking de países que realizan los autores con base en sus estimaciones de homicidios carece de cualquier rigor metodológico, mencionó la SRE.
Partiendo de cifras correctas, agregó, sería viable hacer comparativos por tasas para así tomar en cuenta las diferencias en el número de habitantes de los países.
Refirió que de acuerdo con cifras de la ONU de 2014 (el reporte más reciente a nivel internacional), México está lejos de ser uno de los países más violentos del mundo.