Era un momento al que estaba acostumbrado Flyer Boy. El rival tendido y el instante de subir a las cuerdas para ejecutar su tradicional ejecución, su “finisher”, un mortal con 450 grados de giro. ¿Peligroso? Demasiado, tanto que un pestañeo al caer le costó muy caro.
El esteta xalapeño, quien venía en ascenso al ser considerado ya por la empresa DTU salió con fractura de radio, casi a la altura de la flexión del brazo, lo que le alejará, por lo menos, cuatro meses de los encordados, tras la función especial gratuita para niños en el Centro Deportivo Ferrocarrilero.
Es por eso que un grupo de elementos del pancracio local, como Tótem, Kid Lobo, Marvel Black, Princesa Metálica, Vengadorcito Radioactivo, entre otros, han subastado sus máscaras para reunir dinero en apoyo a la intervención quirúrgica a la que será sometido el gladiador.
El mismo Flyer Boy hizo lo propio con todo su equipo de trabajo para reunir fondos para lo mismo.
Aficionados también se han manifestado, incluso el anestesiólogo Julio César González Ortiz ha puesto sus servicios gratuitos en su afán de apoyar la situación.
A la distancia, el luchador xalapeño se dijo agradecido con la gente que le ha tendido la mano para darle soporte en este momento, especialmente al Doctor Radioactivo, al líder de DTU, Crazy Boy, y a Perro Mocho júnior por haber estado a su lado al momento de la lesión.
“Esto sólo me hace aferrarme más a mis sueños, y motivarme a regresar aún con más fuerzas; les prometo a todas las personas que me apoyan que esto pasará de la mejor manera y seguiré brindándome como hasta ahora con amor y pasión por lo que hago, lucha”, concluyó.