Científicos indo-estadunidenses del Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad de Texas, en Estados Unidos, crearon un preservativo que, además de aumentar el placer sexual, tiene antioxidantes que atacan el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH).
La doctora Mahua Choudhury, investigadora del centro, dijo que la idea fue crear un producto que protegiera al usuario y, a la vez, le ayudase a disfrutar las relaciones sexuales. El condón contiene una sustancia gelatinosa reforzada con antioxidantes que atacan al VIH y estimulan las terminaciones nerviosas, explicó la doctora Choudhury.
Reticencia a usar el condón
Choudhury afirmó que mucha gente no usa preservativos porque, según dice, no la ayuda a tener placer sexual. Datos de la ONU indican que, pese a que ha habido avances en las últimas dos décadas, millones de personas en el mundo aún no tienen acceso al condón o no lo utilizan por barreras psicológicas o tabúes.
Según el Fondo para la Población de la ONU, el uso del condón para mantener relaciones sexuales con personas que no son la pareja regular varía desde 80 por ciento en países como Namibia hasta menos de 40 por ciento en otras naciones, incluyendo a algunos con altas cifras de afectados por el VIH. Entre los jóvenes de 15 a 24 años, el uso de preservativos varía desde el 80 por ciento en algunos países latinoamericanos hasta 30 por ciento en naciones de África Occidental.
Creencias populares y factores culturales juegan un papel importante en el uso de preservativos. Según la doctora Choudhury, la motivación del proyecto ha sido precisamente crear un producto que ayude a que más gente se sienta motivada a usar preservativos.
“Esto haría posible que las personas adquirieran un producto que las protegiese, pero que también volviera la relación sexual más satisfactoria”. Y lo más interesante, dice la investigadora, es que no hay nada similar en el mercado que ayude a prevenir tan efectivamente el VIH.
Nueva generación de condones
Este condón es el resultado de una iniciativa de la Fundación Bill Gates para crear un nuevo tipo de preservativos. Hace dos años, Gates y su esposa, Melinda, pusieron a disposición de emprendedores fondos de hasta 100 mil dólares para desarrollar una “nueva generación” de condones más finos y eficaces.
El centro de la Universidad de Texas fue uno de los beneficiados. Hasta el momento se trata sólo de un prototipo, aclara Choudhury, pero hay mucho interés y se prevé que estará disponible en el mercado en un año. “En este momento estamos creándolos, luego será una cuestión de afinar detalles”, explicó.
Pero, ¿cuán accesible será este preservativo? La doctora prevé que una vez se esté fabricando a gran escala será una cuestión de centavos de dólares.
Fuente: BBC Mundo
