(Más que plática, al menos en mi caso, la charla que sostuvo ayer Rubén Aguilar, coordinador de Comunicación Social en la Presidencia de Vicente Fox, con un grupo de periodistas xalapeños invitados por su amigo Erik Porres Blesa, secretario de Desarrollo Económico, fue una auténca cátedra sobre el tema de la comunicación social en México. Fue muy ilustrativa por su experiencia y por el conocimiento que tiene de la realidad de los medios en el país así como de las prácticas de nuestro periodismo. Como si eso hubiera sido poco, nos trajo a regalar su más reciente libro La comunicación presidencial en México 1988-2012 que escribió junto con Yolanda Meyenberg y que es lectura obligada.)
Este jueves se acaba la indefinición al interior del PRI. La concreción de la alianza entre el PAN y el PRD aceleraron los tiempos en el tricolor: en una reunión que tendrá lugar en la Ciudad de México que encabezarán el dirigente nacional del PRI Manlio Fabio Beltrones y el gobernador Javier Duarte de Ochoa se formalizará la determinación de que el candidato único a la gubernatura del estado, de dos años, será el senador Héctor Yunes Landa.
El anuncio de tal decisión urbi et orbi, esto es, públicamente y en especial para el priismo del estado podría hacerse hoy mismo y si no, será el viernes cuando se dé a conocer, así como también se acelerará la publicación de la convocatoria para el registro formal de Héctor como el precandidato único a lo que seguirá pronto la convención en la que lo “elegirán” los delegados priistas.
Se sabe que a la reunión en la capital del país asistirán además de Beltrones y de Duarte los cuatro firmantes del Acuerdo de Unidad, Alberto Silva Ramos, Erick Lagos Hernández, José Francisco Yunes Zorrilla y Héctor Yunes Landa, y, café de por medio, acordarán los términos de la convocatoria pero también, al menos eso les pedirá el dirigente nacional, ahora sí marchar unidos en aras de sumar fuerzas y de no poner en riesgo la pérdida del poder.
Un punto clave que pondrá sobre la mesa Beltrones será que deberá dársele su lugar al gobernador, guardar respeto a su investidura, reconocer que es factor de unidad así como su papel estratégico como operador político determinante para ganar la elección… si es que gana el PRI.
La decisión oficial que hoy se tomará pondrá fin a la incertidumbre y al caos (eso esperan), a la confusión que hay entre el priismo de Veracruz y buscará reagrupar a todos los actores y a toda las corrientes en torno a quien será su figura estelar a partir de ahora. En el PRI nacional estaban preocupados porque día que pasaba sin tener precandidato formal y de unidad era día que se perdía en favor de quien será su serio oponente.
Definida ya la figura habrán de suceder varias cosas más. Se espera que muertas ya las posibilidades para Alberto Silva Ramos de ser el candidato, como pretendía, se acuerde entre Manlio Fabio Beltrones y Javier Duarte de Ochoa su relevo al frente de la dirigencia estatal del PRI, pues es claro que ya no tendrá el ánimo que se la ha visto hasta ahora cuando trataba de sumar para sí. En lo inmediato o en lo mediato se perfilaría para llegar a la presidencia del Comité Directivo Estatal al expresidente del partido Felipe Amadeo Flores Espinosa, quien no sólo tiene experiencia sino autoridad y capacidad negociadora y conciliadora.
Pero también cambia totalmente el panorama para todos los que ya se alistaban para ser candidatos a diputados locales impulsados desde el grupo en el poder local. La alianza entre el PAN y el PRD los tambalea, pues si –según desde la óptica del PRI nacional– para la competencia por la gubernatura no representa un riesgo aunque reconocen que va a estar muy reñida la elección, sí lo es para el caso de las diputaciones, pues, ponen un ejemplo, harían polvo a Gabriel Deantes Ramos en el distrito de Zongolica. Del único del que tienen la seguridad de que va a ganar porque tiene muy trabajada la plaza y porque mantiene buenas relaciones lo mismo con el gobernador Duarte que con los senadores Yunes es Viente Benítez González, de los Tuxtlas. Visualizan que en Xalapa llevan las dos diputaciones perdidas, aunque harán un intento por salir avantes.
El mismo viernes el senador Héctor Yunes Landa podría anunciar que solicitará licencia para dejar su escaño en el Senado, ante lo que entraría de inmediato en su relevo su suplente Erika Ayala Ríos, actual dirigente del Sector Popular del PRI en Veracruz.
Así, la batalla al interior del PRI por la candidatura termina y comienza la otra, la grande, la madre de todas las batallas políticas, la del tricolor contra la alianza de la derecha y la izquierda, esto es, de los primos Yunes, de Héctor contra Miguel Ángel y viceversa, una guerra que se espera cruenta en la que triunfará quien mejor estrategia traiga y ofrezca mejor propuesta al electorado.
(No deja de ser significativo el Tweet que retuiteó ayer después del medio día la señora Rosa Borunda, expresidenta del DIF Estatal, esposa del exgobernador Fidel Herrera Beltrán, de que “@ave_veracruz ‘destapa como su candidato a @HectorYunes para Gobernador.”)
El acuerdo de este día en la Ciudad de México marcará el principio del fin de un proyecto de doce años, el del fidelismo-duartismo, y abre las expectativas a una nueva etapa en la historia política del estado que puede tener como desenlace la permanencia o la pérdida del poder por parte de los tricolores, final que habrá de escribir el electorado, los ciudadanos con su voto el primer domingo de junio próximo. Por lo pronto, en la carrera por la candidatura del PRI, consummatum est.
Este jueves habrá nuevo presidente de la CEDH
¿Quién para la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH)? Este jueves la Comisión Permanente de Derechos Humanos, Atención a Grupos Vulnerables y Migrantes presentará para su votación ante el pleno de la LXIII Legislatura el dictamen de la terna de aspirantes de la que surgirá el nuevo presidente del organismo.
De acuerdo a los integrantes de la comisión, diputados Jaqueline García Hernández, Leandro Rafael García Bringas y Jesús Vázquez González, los aspirantes Namiko Matzumoto Benítez, Rafael Ortiz Castañeda y Enrique Córdoba del Valle “reúnen el perfil, están preparados, tienen experiencia académica y práctica del tema en mención”, pero sólo uno puede ser.
Los tres estudiaron derecho y los tres fueron a prepararse a universidades en el extranjero, Namiko y Enrique son compañeros académicos, y del trío, Matzumoto ya aspiró al cargo hace cinco años cuando tuvo entonces todo el apoyo, qué cosas de la vida, de la prensa, aunque perdió ante Fernando Perera Escamilla.
¿Influirá en su favor la opinión aprobatoria que recibió su trabajo al frente de la Comisión Estatal para la Atención y Protección de los Periodistas por parte de Edison Lanza, Relator Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos el pasado 29 de septiembre cuando visitó Veracruz para conocer su trabajo?
El dictamen de los miembros de la comisión no debió haber sido fácil porque los tres tienen los méritos para estar al frente de la CEDH. Este día saldrá luz verde. A ver si no perjudica a Ortiz Castañeda el pronunciamiento anticipado que hizo a su favor la bancada panista.