Los focos rojos ya están encendidos en el puerto jarocho. Los Tiburones Rojos no ganan, no convencen y no juegan bien.
Volvieron a perder, ahora 2-1 ante los Gallos Blancos del Querétaro, que hicieron morir de nada a los de Carlos Reinoso, que no supieron aguantar la ventaja y que, nuevamente con distracciones, salieron con la cabeza agachada de “La Corregidora”.
El plan le falló al “Maestro”, que se la jugó a aguantar y buscar un latigazo a velocidad para sorprender a la zaga de los dirigidos por Víctor Manuel Vucetich, o tal vez con una pelota parada.
De hecho la táctica fija le dio dividendos a los escualos en el primer tiempo. Tras el cobro de un tiro libre Édgar Andrade remató una bola que se estrelló en el larguero. El rebote lo aprovechó Julio Furch para adelantar a los jarochos al minuto cuatro.
Y lucía un tiburón imponente, sólido, el argentino estuvo cerca de firmar un golazo de tijera casi de inmediato, que iba a ser una losa para los emplumados.
Pero al 14′ Rodrigo Godínez perdió la cabeza y cometió una falta flagrante e innecesaria en el área sobre Emmanuel Villa. El árbitro marcó penal, que fue bien ejecutado por “El Tito”.
El primer tiempo pasó sin pena ni gloria ya, con esporádicas llegadas de ambos conjuntos.
En el complemento, el libreto no cambió. Gallos Blancos insistiendo y el Veracruz aguantando, a la espera de un latigazo, que casi lo resolvió.
Pero fue el local el que insistió y presionó el marco de “Matute”, aunque sin éxito, pero al 82′ Luis Esqueda halló una bola chorreada en el área rojiazul y la conectó para darle la ventaja a los queretanos.
Sobre la hora, los Tiburones Rojos tuvieron un par de oportunidades, pero sin éxito y Vucetich jaló aire después de un complicado inicio de torneo.
Pero en tierras jarochas la doctrina de “El Maestro” Reinoso parece que está próxima a acabar tras tener apenas tres puntos de 15 posibles y debiendo de enfrentar al América el próximo viernes en “El Pirata”.
