Sólo en nuestro país puede suceder que un sujeto pase de ser un alegre y bebedor acompañante de mesa de Servando Gómez Martínez, ‘La Tuta’, a fiel asistente a la misa en el estadio ‘Venustiano Carranza’, allá en Morelia, ofrecida por el Papa Francisco.
Así fue como, con paso firme, portando un sobrio traje negro y acompañando a una mujer de la tercera edad que presentaba problemas físicos y se sostenía de un bastón, Rodrigo Vallejo, ‘El Gerber’, se dirigió al lugar asignado.
En su recorrido por el empastado del coso de Vasco de Quiroga, en Morelia, Vallejo Mora evadió a los medios que de inmediato captaron su presencia, mientras que alguno que otro de los feligreses ahí congregados lo observaban con asombro.
Del hijo del ex gobernador michoacano poco o casi nada se sabía tras recibir por parte de juez federal una sentencia de 11 meses y siete días de prisión, además, de una multa de mil 749 pesos con 54 centavos, por encubrir a Servando Gómez Martínez, ‘La Tuta’, líder de ‘Los Caballeros Templarios’.
Sí, el Juzgado Decimosexto de Distrito de Procesos Penales Federales en la Ciudad de México, lo encontró culpable, pero el 12 de abril de 2015, ganó un amparo y pagó una fianza de ¡7 mil pesos!, con lo que obtuvo su libertad.
Y ahora, tras cuatro meses sin saber de él, reapareció Rodrigo Vallejo, lo hizo para asistir a misa, pero a una en particular, la que ofició el Papa Francisco en tierras michoacanas.