Fin a la precampaña, viene la buena

Como no hay fecha que no se cumpla, la del fin de las precampañas electorales rumbo a la elección del 5 de junio para renovar el Congreso y la gubernatura ya terminó.
Para ser el primer round de sombra, dejó muchas marcas sobre el rostro y el cuerpo de los oponentes.
Llega ahora un periodo de silencio proselitista hasta que arranque la campaña real que durará abril y mayo.
Si se hiciera un balance, puedo decir que Héctor Yunes enfrentó la realidad, ya tuvo un bosquejo de lo que viene y salió fortalecido.
Su cierre de precampaña y prácticamente augurio de lo que viene fue bueno, llegaron los grandes del PRI a arroparlo.
Su equipo cercano, los del famoso cuarto de guerra, entendieron que no puede estar aguantando la ventaja hasta el último día.
Dicen que habrá un golpe de timón a partir de este lunes y pondrán las cosas en su lugar.
Héctor intentó ser tan plural que cayó en el desorden.
Tan incluyente que metió hasta los que no tienen que estar ahí.
Seguramente también harán una revisión.
Los que aportan ya se vio quienes son, los que están a ver que sacan, también ya mostraron el cobre.
Si los manda a la fregada no va a perder nada, ojalá y lo haga.
En la esquina de Miguel Yunes Linares también se midieron fuerzas.
Sigue como retador y abajo en el marcador. Este primer round le sirvió para medirle el agua a los camotes, ya no tiene ninguna otra oportunidad, es ahora, ya, como dice él, o no será nunca.
Aunque la gente quiere sangre y que paguen los responsables de la debacle que vivimos, el panista está a tiempo de modificar algo su discurso electoral, y entender que si bien todos están felices de que Duarte y su pandilla vayan a la cárcel como así lo anuncia, también hace falto algo de propuesta positiva.
¿Qué más sigue para Veracruz además de hacer justicia?
Queda claro, que con los inútiles y dementes que hay, o sin ellos, Veracruz avanza porque es más grande que cualquiera que intente dañarlo.
Por ejemplo el puerto veracruzano tiene que crecer porque es una exigencia del comercio marítimo, le invierta dinero o no el gobierno estatal, – que no lo ha hecho – y que el gobernador tome como suyas las obras federales y las inversiones privadas, a nadie le interesa, porque simplemente tiene que crecer a la demanda de las necesidades comerciales y de las exportaciones mexicanas.
En el turismo los hoteleros y restauranteros van a invertir contra viento y marea, porque es la vocación natural de muchas zonas turísticas estatales.
No hay vuelta de hoja, con Duarte, sin Duarte y a pesar de Duarte, Veracruz va a crecer.
Por eso además de la promesa de cárcel para los rateros, hay que proponer un proyecto de estado, desde hace más de 15 años no existe, hay dos sexenios perdidos en Veracruz, y si me apuran tantito, quizá hay tres sexenios tirados a la basura.
Así que la alianza PAN/PRD tiene que proponer como relanzar a Veracruz al sitio productivo que le corresponde.
Al final de la precampaña, también surgió la figura de Armando Méndez de la Luz, uno de los alcaldes que tiene buen recuerdo en la ciudadanía xalapeña.
Arropado por el partido de mayor crecimiento en México, Movimiento Ciudadano, antes Convergencia que puede tener en 2018 su primera gubernatura en Jalisco, ¡y vaya estado que puede ganar!, ahí gobiernan a unos 4 millones de habitantes de un poco más de 5 que tiene la zona metropolitana de Guadalajara.
El partido de Dante Delgado ya gobernó la capital de Veracruz alguna vez, y es probable que haya sorpresas rumbo al 5 de junio.; sobre todo, si se alía con Morena.
Méndez de la Luz sabe que hoy más que nunca, tiene oportunidad de entrar a la competencia, aunque la ventaja la lleve el PRI, seguido de la alianza azul y amarillo
Las precampañas dejaron ver el estilo de los principales candidatos, sus fortalezas y debilidades. Algunos siguen creyendo en eventos masivos, quieren ganar con percepciones, otros en eventos mas bien privados; unos se reunieron con líderes y empresarios, otros con jóvenes y militantes.
El Pipo, el Bueno y el Cuitláhuac, nadaron de a muertito, creen que así pueden hacer más con menos, porque no se ve que tengan mucho para la campaña.
La de Cuitláhuac de plano es la campaña de El Peje, y está muy pero muy raro, que ni un chiflido le tiran a Duarte, cuando es la especialidad del tabasqueño dueño de Morena.
Bueno muy tímidamente medio lo araña, y El Pipo, pues si le tira al gobernador, se queda sin patrocinador, los del PES, no le darán ni agua, por eso no tienen en donde nadar.
Así las cosas, a partir de este lunes inicia una calma chicha que presagia tormenta muy pronto.
Veremos y diremos.