En el penal de Pacho Viejo se llevó a cabo la pasión y muerte de Cristo.
Un grupo de internos de ese reclusorio participaron en este evento, que se realiza año con año.
Efrén Corona Santiago, quien interpretó a Jesús, dijo que fue una gran experiencia representar al nazareno: «Para mí es un orgullo, porque a mí me inculcaron la fe católica, para mí es un orgullo hacer esta representación esperando no ofender al de arriba”.
Explicó que tuvo que prepararse durante un año para que este acto saliera a la perfección, y mencionó que esto se logró también gracias al apoyo de sus compañeros: «Hace un año que me invitaron y se hacen unos ensayos con unos meses antes; me preparo haciendo ejercicio, no estar gordito, es costoso, pero vale la pena el esfuerzo que se hace».
Actualmente Efrén cumple condena por el delito de homicidio, de los cuales lleva ocho años, confía que con su buen comportamiento le sea otorgada la libertad.
«Para que algún día me den una posible pre-liberación, tratar de echarle ganas, lo que hagas aquí lo tienes que hacer afuera”, finalizó.
