El gobernador panista de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, nos platican, está a punto de abrir otros frentes de batalla en vísperas de las elecciones municipales, cuando se renueven las 212 alcaldías. A don Miguel, nos dicen, se le agotó el tema de su antecesor priísta Javier Duarte, cuya detención por actos de corrupción fue una de sus principales promesas de campaña y que le funcionó bien en los pasados comicios. Ahora, nos comentan, con las elecciones encima, prepara sendas denuncias penales en contra de los ex mandatarios Miguel Alemán y Fidel Herrera, así como contra decenas de sus colaboradores. Lo que pierde de vista don Miguel, aseguran sus adversarios políticos, es que no es lo mismo quitarle el dulce a un “chiquillo” que ponerse con Sansón a las patadas. (Fuente: El Universal, “Kiosko”, 11/ENE/2017).