Trump regala al radical Bannon una silla en Seguridad Nacional

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, decidió el sábado, vía otra orden ejecutiva, elevar a su estratega en jefe, Stephen Bannon, a miembro del Consejo de Seguridad Nacional, donde se despachan las reuniones de mayor secreto del país.

Bannon, que genera fuerte polémica por sus posiciones extremistas, ve premiada, así, su fidelidad a Trump, puesto que ya estuvo al lado del presidente como su jefe de campaña en los últimos meses de la carrera electoral.

El ex director del portal radical, y próximo a la ultraderecha de nueva generación, Breibart, se sentará junto al jefe del consejo, el general retirado Michael Flynn, que a su vez también ejerce como asesor de Trump.

Quienes dejarán de sentarse en la mayoría de reuniones serán el director nacional de Inteligencia y el jefe del Estado Mayor Conjunto del Ejército, a quienes el magnate republicano ha decidido degradar, y sólo podrán asistir a las reuniones que, específicamente, se celebren sobre sus áreas de trabajo.

Ésta es una decisión, pues, doblemente controvertida, porque estas dos figuras eran fijas en todas las reuniones del consejo bajo otras administraciones, como las de Barack Obama o la del también republicano George W. Bush.

El ascenso de Bannon refleja el inmenso poder que quien la pasada semana aseguró que la prensa “debería estar callada” tiene en la Casa Blanca; según la emisora CNN, por ejemplo, el estratega en jefe de Trump sería el cerebro bajo el veto impuesto por Washington el viernes a ciudadanos de siete países de Oriente Medio.

JUSTIFICACIÓN. El vocero de la Casa Blanca, Sean Spicer, salió ayer en defensa de la orden ejecutiva y de Bannon, afirmando que el nuevo miembro del Consejo de Seguridad Nacional “tiene un conocimiento tremendo del mundo y de la situación geopolítica actual”.

“NAZI”. Sin embargo, la decisión ya levantó una gran cantidad de críticas entre quienes discrepan con Spicer sobre la cualificación de Bannon. Susan Rice, que fue asesora de Seguridad Nacional con Obama, tildó el ascenso de “locura” en un mensaje que publicó en Twitter. La que fue también embajadora de EU ante Naciones Unidas republicó, además, el mensaje de otro usuario que afirmaba que “a Trump le gusta tanto el ejército que les ha expulsado del Consejo de Seguridad Nacional y ha puesto a un nazi en su lugar”.

¿Qué es y qué hace Seguridad Nacional?

El Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos es un órgano del gobierno que depende directamente del presidente, en este caso, pues, de Donald Trump. Es esencialmente un grupo de consulta para los asuntos más estratégicos del país, incluyendo materias de inteligencia, defensa, seguridad nacional (valga la redundancia) y política exterior en general.

Pese a depender del presidente, lo suele presidir y manejar el Consejero de Seguridad Nacional, un cargo ad hoc. En estos momentos este cargo lo ostenta Michael Flynn, un general retirado con un perfil islamófobo, elegido por Trump para la tarea. Flynn, además, ejerce de asesor del presidente, creando un flujo de comunicación directa entre la Casa Blanca y este órgano.

Para entender la importancia de este consejo podemos ver alguno de los nombres más destacados en los últimos tiempos, como fue por ejemplo Condolezza Rice, quien tomó gran relevancia mediática en el primer mandato de George W. Bush por su tarea estratégica sobre la guerra de Irak y de Afganistán.

En sus estatutos, el Consejo de Seguridad Nacional especifica que a las reuniones deben asistir el vice presidente, ahora Mike Pence, el secretario de Estado, Rex Tillerson, el secrtario de Defensa, el general retirado James Mattis, además del Consejero de Seguridad Nacional y el propio presidente.

El Consejero de Seguridad Nacional tiene tanto poder que en ocasiones es quien lleva personalmente reuniones de alto nivel con delegaciones extranjeras. Por ejemplo, en 1972, Henry Kissinger ejercía el cargo, y llevó en secreto negociaciones con China para su posterior reconocimiento oficial.