Dicen que si hay algo peor que un traidor, es que éste sea además tu familiar. Y en Perote hay mucho de eso.
Nos cuentan que detrás de los grupúsculos que intentan desestabilizar al gobierno municipal con el fin de golpear al grupo político del senador José Francisco Yunes Zorrilla, está ni más ni menos que su primo, Juan Manuel Velázquez Yunes, quien está obsesionado con convertirse en cacique en la región.
Así, no sólo manipula a su madre para que se presente a las elecciones municipales como candidata “independiente”, sino que azuza a quienes han salido a vociferar que hay supuestas imposiciones en el PRI de Perote, y que no son más que tres de sus “chalanes”, que no representan ni a los habitantes de su cuadra.
Ya se le olvidó a Velázquez Yunes que antes de ser alcalde y diputado era un empresario en quiebra, que andaba en un auto austero, y que fue gracias al apoyo de la familia de la que ahora reniega que salió del anonimato y la “peladez”.
Pero los traidores siempre acaban mal. No falla.
