Los Tigres le dieron un golpe de realidad al Veracruz. La gran entrada en el “Luis de la Fuente” sirvió solamente para ver cómo los Tiburones Rojos perdían el invicto y de forma escandalosa.
Un 0-3 que disipó la alegría de apenas hace dos semanas, cuando entonces superaban los escualos a Chiapas y se soñaba en la salvación. Este fin de semana podrían acabar coleros en la porcentual si Morelia vuelve a ganar.
Y como dice el viejo adagio, el Tiburón es el máximo romperrachas del futbol mexicano. El campeón del futbol mexicano venía con tres partidos sin ganar y sin anotar. En “El Pirata” se acabó la sequía.
El primer tiempo pasó sin pena ni gloria para ambos equipo, pero en el complemento los pupilos de Ricardo Ferreti se enchufaron. Cayó el primero y el racimo se dio.
Pero qué mal defiende el Veracruz. Regularmente lo hacía fuera de casa. El primer gol cayó al 64 apareció un servicio de Ismael Sosa hacia un Andre Pierre Gignac que ingresó solo al área, aislado de la marca, para cabecear y vencer a Melitón Hernández.
Y al 75 otra vez mal parada la zaga jarocha. Un nuevo servicio por el costado de la derecha y Luis Quiñones se lanzó de “palomita” para adornar el remate solo y poner el segundo zarpazo.
El tiro de gracia lo metió Jurgen Damm, Ya ante un rival descompuesto y buscando ofender desbocadamente. Llegó un servicio rápido a Jesús Dueñas que tras la conducción cedió hacia el nacido en Tuxpan para firmar la sentencia.
Con las llamas del descenso rozando, Veracruz deberá esperar que Morelia no gane este sábado contra Toluca en el “Morelos” y no compartir la última casilla de la porcentual.
Los heridos pupilos de Carlos Reinoso deberán visitar Pachuca en la octava jornada de Clausura 2017.
