En la entidad ha desaparecido hábitat de loros, pericos y guacamayas 87%, afirma investigadora

La académica del Instituto de Biología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Patricia Escalante señaló que el hábitat de loros, pericos y guacamayas en el estado ha desaparecido en un 87 por ciento.

“La fragmentación de hábitat y pérdida de este mismo en cantidades catastróficas, ha provocado que no haya población abundante ni a corto plazo”.

Añadió que el riesgo aumenta por la inminente aprobación de una iniciativa de reforma al artículo 62 bis de la Ley General de Vida Silvestre, que prevé eliminar la prohibición de extraer poblaciones de loros y guacamayas de su hábitat natural y a la vez propone un sistema de vedas.

En rueda de prensa, abundó que la tasa de reproducción en estos animales es baja,  pues es apenas del 0.58 por ciento y al no haber reproducción tampoco hay reemplazo natural y lo que se tienen son poblaciones longevas que no salvaguardan a estas especies.

Lamentó que no hay suficientes lugares para su reproducción, pues estas aves buscan árboles de 40 metros para anidar.

“Es una población reducida en tamaño y que sus tasas reproductivas son bajas, no todos los años esta especie se reproduce, y del número de huevos que ellas ponen, que son dos, llega a haber solo un polluelo por una pareja, pero este también tiene que crecer  y a la edad de madurez sexual es tardía”.

Por lo anterior la tasa de crecimiento de la población se va a ver reflejada en cantidades de ejemplares pero en un plazo muy amplio, porque requiere temporadas largas.

Asimismo, dijo que actualmente no se tiene la reproducción y se extraen ejemplares de su misma especie, pero al extraerlos se reduce el pull genético y entonces se seleccionan menos individuos y esto genera problemas en la población pues no se pueden reproducir en forma natural.

La investigadora exhortó a las personas que no adquieran especies en peligro de extinción o amenazadas, sino adopten especies con menos expectativas de vida.