Como ya se ha hecho costumbre, los sanguinarios capos del narcotráfico, una vez atrapados y encarcelados, se vuelven muy delicados y celosos defensores de sus derechos humanos. Tal es el caso del exlíder de Los Caballeros Templarios, Servando Gómez Martínez, La Tuta, denunció a las autoridades del Centro Federal de Readaptación Social 1 Altiplano por presuntos actos de tortura.
El criminal detalló a través de un amparo que ha sido recluido en una celda de castigo por más de 24 horas, se le ha mantenido incomunicado y segregado, y, además, es víctima de tortura psicológica.
El exmaestro de Michoacán, quien fue aprehendido el 27 de febrero de 2015 acusado por los delitos de narcotráfico, delincuencia organizada y secuestro, comparó la celda de castigo en la que ha sido puesto como un calabozo, ya que, asegura, ahí no entra la luz del sol.
Además reclama que no ha visto a sus abogados ni ha tenido visitas familiares como tampoco íntimas.
Ante esta situación, el Juez Primero de Amparo de Distrito en materia de amparo y juicios federales en el Estado de México concedió suspender los actos que manifiesta La Tuta para evitar que éstos sean calificados como actos de tortura.
El juez consideró que el criminal debía recibir sus alimentos en un lugar que elijan las autoridades, porque, si éste asiste al comedor del penal del Altiplano puede correr peligro tanto su integridad física como mental.
Asimismo ordenó que el ahora recluso pueda, con lo dispuesto en los reglamentos del penal, ver a sus abogados y sus familiares.