Montano, ¿el Rudolph Giuliani xalapeño?

Luego de los constantes encontronazos entre Andrés Manuel López Obrador y Miguel Ángel Yunes Linares, lo menos que querría el mandatario estatal es que en las elecciones del 4 de junio ganara la alcaldía de Xalapa el académico Hipólito Rodríguez Herrero. ¿Se imaginan que Miyuli tenga a un presidente municipal pejista? Casi se reeditaría la tremenda bronca que hubo entre Miguel Alemán Velazco y Rafael Hernández Villalpando, quien enfrentó un juicio por bigamia, pero que nunca fue detenido porque el ex rector de la UV y ex Subsecretario de Gobierno se dio a la fuga. Por eso es que a Yunes Linares le convendría que ocupara la silla municipal David Velazco Chedraui de la alianza PAN-PRD o bien el priista Alejandro Montano Guzmán, quien –a fuerza de decir verdad— es un hombre de instituciones. No nos imaginaríamos a Alejandro confrontándose con el huésped de Palacio de Gobierno. El ex secretario de Seguridad Pública llevaría la fiesta en paz. Y ya encarrerados con Montano, vale decir que ha permeado entre la opinión pública xalapeña que si alguien sabe y conoce del tema de la seguridad, es precisamente el ex diputado local y federal. A la capital le urge alguien que meta orden, dado los cada vez más frecuentes hechos delictivos. Sin ánimo de exagerar, Montano sería algo así como una especie de Rudolph Giuliani, quien como alcalde de Nueva York (¿se acuerdan?) rescató a la ciudad del hampa. Por otra parte, es de destacar que Montano será de los pocos candidatos que será ungido sin que haya fracturas o divisiones. Por último, a los burócratas municipales ya les está cayendo el “veinte” y no desean que les pase lo mismo que a los empleados estatales, quienes votaron ingenuamente a favor del verdugo que luego los corrió (y de fea manera) y los puso de patitas en la calle. Vaya que la historia sirve para no cometer los mismos errores.