El Papa Francisco expresó hoy su sentimiento de horror por el ataque que dejó decenas de víctimas inocentes en la provincia de Idlib, y que varios países condenaron acusando el uso de armas químicas.
Al término de su audiencia pública semanal, ante más de 16 mil personas congregadas en la Plaza de San Pedro del Vaticano, el Papa manifestó su “firme condena” a la “inaceptable masacre”, en la cual “fueron asesinadas decenas de personas inermes, entre ellas niños”.
“Asistimos horrorizados a los últimos acontecimientos en Siria”, sostuvo, en referencia al ataque perpetrado en la localidad de Jan Sheijun, que dejó al menos 58 muertos y decenas de heridos.
Aseguró que reza por las víctimas y sus familiares. Además, hizo un llamado a la conciencia de cuantos tienen responsabilidad política, a nivel local e internacional, “para que cese esta tragedia” y se lleve alivio “a aquella querida población, desde hace demasiado tiempo devastada por la guerra”.
“Animó, además, los esfuerzos de quien, no obstante la inseguridad y las dificultades, se empeña en hacer llegar la ayuda a los habitantes de aquella región”, estableció.
El ataque fue condenado por Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Turquía, quienes coincidieron en atribuirle la autoría a las fuerzas militares del presidente sirio, Bashar al-Assad.
Por otra parte, también este día el Papa Francisco expresó su cercanía a los afectados por el atentado terrorista de esta semana en Rusia, que dejó 14 muertos.
Afirmó que dirige su pensamiento al pueblo ruso por el “grave atentado” del lunes en el metro de San Petersburgo, que provocó víctimas y confusión en la población.
