Su sonrisa y su gesto denotan alegría, pero los ojos y el aspecto de Jim Carrey dicen todo lo contrario. El actor colgó, el pasado 15 de abril, una fotografía para celebrar la Pascua y, aunque aparece con un conejito y una zanahoria, su cambio físico no ha pasado inadvertido para sus miles de seguidores en Twitter.
Con el cabello largo y una larguísima barba repleta de canas, así se ha fotografiado el comediante casi un año después de su divertida imagen haciendo uno de sus habituales gestos, aunque en julio no había rastro ni de melena ni de una cara tan poblada de barba.
La estrella cinematográfica de 55 años decidió dar un paso atrás y mantener un perfil bajo tras el suicidio de su ex pareja, Cathriona White, en septiembre de 2015.
Desapareció totalmente durante 2016 tras las dos acusaciones contra él interpuestas por la madre de la maquilladora, Brigid Sweetman, y Mark Burton, el que fuera ex marido de la joven.
En ambos casos, al protagonista de La Máscara y El Show de Truman le acusan de «homicidio negligente» y aportan documentación sobre las distintas enfermedades venéreas que le contagió a la mujer de 30 años.





