El copal, algunas semillas, flores y la representación de Tláloc en un recipiente con agua fueron parte de la ofrenda colocada dentro de un círculo que enmarcó parte de la cosmogonía prehispánica para reflexionar sobre la celebración del Día de la Tierra en el barrio de Xallitic.
De esta forma se rememoró la vigilia que se hacía antiguamente del atardecer a la noche rezando a las semillas que serían sembradas en el nuevo temporal.
“Se hacía una velación de las semillas de toda la noche para que rindieran buenos frutos. En nuestra ofrenda tenemos una representación de Tláloc, que es el licor que bebe la tierra. Es el agua, son las lluvias que llegan a la tierra para fecundarla, para que broten los frutos”. El círculo de semillas simbolizaron a la vez a la lluvia para que permitiera la buena cosecha. “Tenemos representados los cuatro elementos de la naturaleza, alrededor las flores amarillas que simbolizan al padre sol”.
Lista la ofrenda y con el incienso humeando, el sonido del caracol llamó al ritual de las danzas para la lluvia que tras el saludo a Ometeotl, que representa la energía dual creadora fue seguido del sonido del wewetl, tambor prehispánico que guió el ritual que ofreció el grupo de danza mexica Ce Acatl Xallitic a la madre tierra o tonantlaltzin.
“Quisimos compartir con la gente el ritual que hacemos para dar gracias a la madre tierra y pedir que haya buenas cosechas, buenas siembras, que lleguen las lluvias a tiempo, porque no haya sequía. Decidimos compartir este conocimiento para que conozcan las tradiciones que hay en el estado porque es muy basto, tenemos 12 pueblos originarios” explicó Rosalía Sánchez Reyez, promotora del patrimonio cultural de los pueblos originarios del estado de Veracruz y representante del grupo de danza mexica que guió el ritual a la madre tierra.
En este evento participó además la Academia Veracruzana de Lenguas Indígenas (AVELI) y el Instituto Veracruzano de Asuntos Indígenas, cuyos representantes destacaron la forma en que las lenguas de los pueblos originarios
“Una de las características principales de los pueblos indígenas es honrar a la tierra, para nosotros los indígenas la tierra es un ser vivo al que hay que respetar y tratar igual que a cualquier ser humano”, destacó Salomé Gutiérrez Morales, Subdirector de Investigación de la AVELI.
“Decimos que nos pertenece el planeta y no al revés, que nosotros pertenecemos a ella. Ahí lo que hacemos desde nuestras lenguas es reverenciar a nuestra madre tierra, que esa entidad como tal es nuestra madre y hay que respetarla” subrayó Elizabeth Tocohua, de esta misma academia.





