Fiel a su estilo, Andrés Manuel López Obrador soltó la zanahoria a los demás partidos que se hacen llamar de izquierda en México: si no se suman ahora a su redil, que ni lo piensen para el año entrante, en las elecciones presidenciales.
Durante un mitin en Naucalpan en apoyo a la candidata de Morena a la gubernatura del Estado de México, el “Peje” exigió al PRD, a Movimiento Ciudadano y al PT declinar en favor de Delfina Gómez, porque lo contrario, en lógica maniquea, es apoyar a la “mafia del poder”.
“Lo digo con toda claridad, con franqueza: si en estos días no hay un deslinde de PRD, PT y Movimiento Ciudadano, y siguen apoyando a Enrique Peña Nieto y al régimen corrupto, no habrá ningún compromiso hacia adelante. En 2018 no vamos a ir con ellos”, sentenció López Obrador.
Y aunque las dirigencias de esos partidos rechazaron el autoritario “ultimátum” del “Peje”, más de uno de sus militantes ya se la está pensando, pues le ven amplias posibilidades a López Obrador de que, ahora sí, se le haga ganar la Presidencia.
Y ni modo de quedarse fuera del presupuesto.
