Al considerarse de respuesta rápida, el cauce del río La Carbonera se mantiene en constante monitoreo por parte de personal de la Coordinación Municipal de Protección Civil (PC) a cargo de Pablo Ramos Huerta.
“El rio de la carbonera aunque actualmente se conserva seco, se trata de un afluente de respuesta rápida que podría dar sorpresas en ésta temporada de lluvias”, aseguró el coordinador de PC.
La Carbonera se alimenta de los escurrimientos de la zona alta de la montaña, propiamente en el municipio de La Perla y Mariano Escobedo, cuyas aguas descienden y al acumularse en Pozas y lagunas pudieran generar con una fuerte tormenta avenidas de consideración.
En años anteriores, durante la temporada de lluvias y con el antecedente de las crecidas, se mantiene monitoreo permanente al registrarse las primeras lluvias de la temporada en la zona de la montaña, de ahí que las acciones preventivas van encaminadas a la información que se emite hacia la población.
Desde hace poco más de tres meses cauce del río La Carbonera se secó, sin embargo con las lluvias de la semana pasada ha resurgido con un caudal de apenas 15 centímetros, sin embargo cuando se registran lluvias torrenciales en la parte alta de la región montañosa este rio desfoga lo que ahí se acumula.
Dijo el funcionario que el año pasado ocurrieron un promedio de 7 ligeras barrancadas cuyas aguas arrastraron graba tierra árboles y piedras de tamaño considerable, por ello el municipio de Río Blanco dragó en tiempo y forma sus presas retenedoras de sólidos ubicadas en los límites con el municipio de Nogales a fin de resguardar a unas 200 familias establecidas en los márgenes de dicho afluente.





