Mediante una marcha, miles de transportistas adheridos a la Alianza Mexicana de Organizaciones de Transportistas (Amotac) marcharon a vuelta de rueda con destino a la Ciudad de México para exigir retirar de circulación las unidades full y frenar los atracos en carretera que han ido en aumento en todo el país.
El delegado de la Amotac en la zona de Mendoza y Orizaba, Aldo Israel Romero Lezama informó que a través de los artículos 35, 39 y 50 de la Ley de Caminos, el Gobierno busca sacar de circulación a las unidades de pasaje que exceden los 15 años de antigüedad, sin importar que están repotenciadas y legalizadas para su circulación en carreteras.
Tan sólo en la zona centro serían más de 2 mil 400 los transportistas (hombres-camión) que se verían afectados por estas disposiciones, además de los transportistas de carga, aunque por ahora está suspendida la acción contra esta modalidad, y temen que sean miles los afectados.
Dijo el entrevistado que con esta marcha hacia el Senado de la República se solicitará una disminución a las tarifas del combustible, un cese a la represión y hostigamiento hacia el transporte de carga y la aplicación correcta de la ley para todos, lo que implica el retiro de las unidades Full en las autopistas que han sido motivo de accidentes y muerte”.
Señaló que por parte de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes hay presión que tiene que ver con revisiones físicas, mecánicas y eléctricas, bajo amenaza de retirar camiones y concesiones que consideren en malas condiciones, además de infracciones de hasta 500 días de salario mínimo que, son más o menos 40 mil pesos de infracción.
Dejó en claro que sólo la Canacar ha aceptado el servicio Full por intereses que hay con la SCT y las demás organizaciones aseguran que las unidades articuladas han venido ocasionando accidentes en carreteras por diversos motivos que van desde las malas condiciones de los sistemas de anclaje y el exceso de velocidad.
Además de ello, comentó que están checando que son tarifas totalmente injustas porque la mayoría de las empresas paga la primera carga del remolque y paga el 50 por ciento del segundo remolque y para los transportistas no es justo porque también la Secretaría de Comunicaciones y Transportes no regula las tarifas por peso, por metro cuadrado o por dimensiones, aunado a ello permitiría que el empleo aumente para los operadores en un 30 por ciento.
