El gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, aclaró que mientras continúen las investigaciones en “La Bamba”, restaurante de ciudad Cardel donde fueron asesinados dos policías federales, el establecimiento no abrirá sus puertas.
Reconoció la preocupación de los empleados del inmueble, quienes han manifestado que se vieron afectados tras los hechos violentos, no obstante aclaró que aún se realizan inspecciones en el interior.
“Ellos no tuvieron la culpa de lo que pasó ahí y lo que les he dicho es que la Fiscalía, ayer platiqué con el fiscal sobre este tema, la Fiscalía está tratando de acelerar todo el procedimiento. Es un procedimiento en el que también está participando la Procuraduría General de la República (PGR)”.
“Y la razón por la cual el lugar está cerrado es porque se pueden obtener más pruebas, hasta que no se concluya la integración del expediente y la integración de las pruebas no se puede abrir”.
Afirmó que, por ejemplo, es necesario mantener el establecimiento cerrado para analizar evidencias como huellas dactilares que hayan quedado tras el ataque en contra de los uniformados.
“Por una razón muy comprensible, por ejemplo huellas dactilares que pudieron haber quedado en algún lugar se borrarían en el momento en el que el lugar se abriera, esa es la razón por el cual el lugar se encuentra protegido, pero les ofrecimos que aceleraremos al máximo, dentro de las posibilidades legales también, se acelerará al máximo el procedimiento para que ellas vuelvan a tener su empleo”.
Indicó que actualmente los empleados del lugar trabajan en el patio de La Bamba de manera provisional, sin embargo a decir del mandatario estatal no son las mejores condiciones.
Finalmente invitó al dueño del restaurante a acercarse a Gobierno del Estado para ver de qué manera se le puede ayudar.





