Luego de la detención de Xóchitl Tress –cuyo caso generó gran estridencia mediática por la
relación sentimental de la exdirectora de Espacios Educativos con el exgobernador Javier
Duarte más que por los regalos que recibió del exmandatario, ya que su monto resulta
insignificante ante los miles de millones de pesos que presuntamente desviaron del erario
estatal el expriista y excolaboradores cómplices–, la Fiscalía General del Estado ha
insinuado que podrían investigar a otras exfuncionarias ligadas a Duarte de Ochoa, lo que
obviamente ha desatado el morbo político que aprovechará el gobierno de Miguel Ángel
Yunes Linares para desviar la atención de los veracruzanos del grave problema de
inseguridad y de otros polémicos asuntos como el de la sospechosa ampliación, por tres
décadas más, de la concesión del libramiento de Plan del Río, cuyo cobro por uso de dicha
vía seguirá explotando hasta el año 2053 el mismo grupo empresarial porteño muy ligado al
mandatario panista y al fiscal Jorge Winckler Ortiz, su exabogado corporativo.
Este jueves, entrevistado al respecto, Winckler no descartó que se investigue a la
exalcaldesa de Veracruz, Carolina Gudiño Corro, y a algunos de sus familiares por presunto
enriquecimiento ilícito.
“Esos son datos de investigación que no se pueden compartir por la secrecía”, respondió
escuetamente a los reporteros, ante cuya insistencia agregó que “no se descarta que se
pueda investigar a cualquier persona que sea en un momento dado denunciada”.
También le preguntaron si abrieron algún expediente contra la exregidora priista de Xalapa,
Corintia Cruz Oregón, quien al igual que Gudiño nunca colaboró administrativamente en el
gobierno de Duarte, ya que después del cargo edilicio, la llamada “Güerita que ayuda” –
como ella misma se publicitó en la campaña electoral de 2016 para la diputación local– fue
suplente del diputado David Velasco Chedraui, secretaria general y presidenta interina del
CDE del PRI.
También le preguntaron acerca de la exregidora priista de Xalapa, Corintia Cruz, quien al
igual que Gudiño nunca colaboró administrativamente en el gobierno de Duarte, pues
después del cargo edilicio Cruz Oregón fue suplente del diputado local David Velasco
Chedraui, y secretaria general y presidenta interina del CDE del PRI.
“Por qué me preguntas cosas que sabes que no te voy a contestar. Evidentemente son datos
reservados que no se pueden dar a conocer”, atajó Winckler.
Corintia, a diferencia de Carolina, sí fue muy cercana al afecto de Duarte, quien en corto se
expresaba muy mal de la edil porteña, ya que hasta después del tercer año de su
administración municipal lo desairó por serle más leal al exgobernador Fidel Herrera
Beltrán, al que le debía toda su trayectoria política: la Dirección del Instituto Veracruzano
de las Mujeres en 2004, la diputación local en 2007, la diputación federal en 2009 y la
alcaldía porteña en 2010.
Hace poco trascendió que Gudiño andaba promoviendo al alcalde de Orizaba, Juan Manuel
Diez Francos, como futuro precandidato a la gubernatura de Veracruz por el PVEM, cuyo
membrete en la entidad está bajo control de Herrera Beltrán a través de su hijo, el diputado
federal Javier Herrera Borunda, y Jorge Carvallo Delfín.
Hace poco trascendió que Gudiño andaba promoviendo al alcalde de Orizaba, Juan Manuel
Diez Francos, como futuro precandidato a la gubernatura de Veracruz por el PVEM, cuyo
membrete en la entidad está bajo control de Herrera Beltrán a través de su hijo, el diputado
federal Javier Herrera Borunda, y su homólogo Jorge Carvallo Delfín, entre otros
operadores políticos del cuenqueño.
Sobre Diez Francos se ha especulado también que sería la segunda opción por el PAN del
gobernador Yunes Linares en caso de que no cuajara la candidatura de su hijo Miguel
Ángel Yunes Márquez, actual alcalde de Boca del Río. A ello se atribuye que en una gira
reciente por Orizaba el mandatario panista colmara de elogios al edil de Pluviosilla, con el
cual tenía un presunto acuerdo de postular a la presidencia municipal por la alianza PANPRD
al exalcalde Hugo Chaín Maluly, quien de última hora se quedó vestido y alborotado
porque tampoco pudo ser abanderado por el PRI porque había renunciado a su militancia
priista públicamente.
Por eso es que existe la percepción de que las filtraciones mediáticas y el acoso de la
Fiscalía en contra del diputado local Fernando Kuri, de Corintia Cruz, Carolina Gudiño,
Ainara Rementería y de la propia Xóchitl Tress, más que un acto de justicia se trataría de
una burda estrategia política-electoral de Yunes Linares para desarticular la red de
operadores del PRI y allanarle a su primogénito el camino hacia la gubernatura de 2018.
La versión no suena descabellada, ya que a mediados de mayo, casi dos semanas antes de la
elección municipal, el dirigente estatal del PRI, Renato Alarcón, y el senador priista Héctor
Yunes Landa denunciaron una maniobra similar por la detención del líder sindical de
TAMSA, Pascual Lagunes Ochoa, y el acoso policiaco en contra de representantes
seccionales del partido tricolor en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río, donde los
candidatos yunistas –entre ellos Fernando Yunes Márquez, el otro hijo del gobernador– les
sacaron una apabullante ventaja a los contendientes de MORENA y de la alianza PRIPVEM.




