El Partido del Trabajo (PT) recurrió ante la Sala Regional Xalapa del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), para impugnar la anulación de su triunfo en el municipio de Uxpanapa, decretada por el Tribunal Electoral de Veracruz (TEV).
Tanto su representante suplente ante el Consejo Municipal del OPLE en esa demarcación, Pedro Hernández Martínez; como Domingo Carmona Rojas, ex alcalde electo, presentaron un Juicio de Revisión Constitucional (JRC) y un Juicio para la Protección de los Derechos Político – Electorales del Ciudadano (JDC), respectivamente, a fin de controvertir el otorgamiento de la victoria a Nueva Alianza (Panal) y a su ex abanderado, Esteban Campechano Rincón.
Y es que afirmaron que el TEV le otorgó valor probatorio pleno -a fin de anular el triunfo- a los testimonios del presidente y secretario general del OPLE en Uxpanapa, del Comisionado del INE y de la consejera Julia Hernández García, en los que adujeron una serie de irregularidades tanto en la jornada electoral como en la sesión de cómputo municipal.
Sin embargo, precisaron en sus impugnaciones, que de dichos testimonios nunca se desprende que efectivamente los paquetes electorales hayan sido manipulados por personas ajenas al Consejo Municipal.
Por el contrario, agregaron que supuestamente los funcionarios son coincidentes en decir que siempre hubo presencia de un elemento de seguridad pública y uno de seguridad privada al interior del Consejo Municipal vigilando el desarrollo de las actividades, “por lo que no hubo tal “manipulación de paquetes electorales que aduce el TEV”.
Otro de sus argumentos para solicitar la revocación del fallo del órgano jurisdiccional veracruzano, refiere que éste fue negligente al no requerir mayores elementos de prueba a fin de sostener su resolución.
“Ya que lo ordinario en estos casos sería requerir informes a la Secretaria de Seguridad Pública (SSP), a la empresa de Seguridad Privada, a los elementos de policía comisionados a la frustrada ‘diligencia de traslado’ de paquetes electorales o en su caso, preguntar directamente a los funcionarios electorales si les consta que hubo manipulación de paquetes electorales”, reseñaron los inconformes.
Adicionalmente acusan al Tribunal Electoral estatal de pasar por alto que las actas en donde se manifiesta que hubo “hechos de violencia” nunca fueron firmadas por los representantes partidistas y por el contrario añaden que en el acta de computo municipal donde resulta ganador el PT, todos ellos firmaron las actas validando con el ello el resultado de la elección.
Los quejosos aseveraron que el TEV se extralimitó en sus funciones jurisdiccionales al asumir competencias exclusivas del OPLE, pues desde sus puntos de vista, lo ordinario sería realizar el recuento total de los paquetes electorales; pero éste realizó un “nuevo computo municipal” con actas de escrutinio que desde el inicio habían sido declaradas irregulares. “Es decir, corrigió un error con otro error”, sostuvieron.
Finalmente y al reprobar los hechos de violencia suscitados a las afueras del Consejo Municipal, acotaron que estos no son suficientes para anular una fase del proceso electoral tan importante como lo es el Computo Municipal.
“Determinar lo contrario, implicaría incentivar conductas de cualquier grupo ajeno a los actores políticos, con la intención de que las fases electorales no se celebren, lo que, sería contrario al principio de conservación de los actos válidamente celebrados establecido en diversas jurisprudencias de la Sala Superior del TEPJF”, abundaron.
