Más tardaron en el PRI en ponerse de acuerdo para los cambios en sus estatutos aprobados durante su pasada Asamblea Nacional, que el Instituto Nacional Electoral en darle “palo” a una de las modificaciones.
Es el caso del llamado “candado antichapulín”, que impedía a los priistas saltar de plurinominal en plurinominal entre el Senado y la Cámara de Diputados, y que les obligaba a buscar su elección por la vía del voto directo.
Con dos votos a favor y uno en contra, la Comisión de Prerrogativas y Partidos Políticos del INE abrió el “candado”, lo cual todavía tendrá que ser ratificado por el Consejo General.
Pero la verdad, no creemos que a ningún priista le apure mucho rescatar esa prohibición estatutaria.





