Antes: Vamos bien y viene lo mejor

Ahora: Vamos mal y esperamos que no venga lo peor.

Luego de una semana de esperar la conformación de la Mesa Directiva de la Cámara Federal de Diputados, el titular de la Secretaria de Hacienda y Crédito Público y hasta hoy el más presidenciable del gabinete, José Antonio Meade Kuribreña, entregó el día de ayer el paquete económico al órgano que ahora encabeza el diputado Jorge Carlos Ramírez Marín.

El titular de la Secretaria de Hacienda y Crédito Público destacó que el paquete económico está construido sobre “pilares de estabilidad, certeza y sentido social” también resaltó que con el paquete económico el gobierno de la República refrenda su compromiso con la austeridad, reduciendo gastos administrativos.

En mala hora y formados como “cobradores en quincena en línea recta” aparecieron y enfocaron sus baterías en contra de los mexicanos, los meteoros José, Irma y Katia; que según los expertos fueron los causantes del más grande temblor que la noche del jueves se registró en todo México, con epicentro en Tonalá Chiapas, con intensidad de 8.2 grados en la escala de Richter, es decir se tornó mas fuerte que el registrado en 1985 en el sexenio de Miguel de la Madrid Hurtado. En los últimos treinta y dos años estos dos sismos, han causando los estragos de mayor impacto, con daños estructurales, físicos y pérdida de vidas humanas, que enlutaron tantos hogares, cuyos montos multimillonarios aún permanecen pendientes de reparación, cuya cuantía ni el propio gobierno de la república registra con certeza.

Ya se verá por las futuras generaciones, si los gobiernos, del sucesor de Peña en adelante, proceden a la reparación inmediata de los daños del último temblor y al resarcimiento económico para los mexicanos afectados en sus patrimonios; o se quedan como todo compromiso del gobierno “sin cumplir”.

Para lo que si servirá la cuantificación, registro y programación de los daños y perjuicios de éste sismo, sin duda será para limpiar la rendición de cuentas de todo el sexenio, plagado de igual o mayor opacidad que los de Fox y Felipe de Jesus Calderón Hinojosa. Todo depende de la licuadora que ocupe el chef de Palacio, en complicidad con el del Poder Legislativo Federal, que preside Jorge Carlos Ramírez Marín, con la asesoría del titular de la Asamblea Superior de la Federación; y en el supuesto de que se retrasara o entorpeciera la transición de poderes del próximo año, con la intervención de los once privilegiados, depositarios del Supremo Poder Judicial.

Por cierto, Meade Kuribreña explicó a los diputados, que el multicitado paquete, se integra por la Iniciativa de Ley de Ingresos, los Criterios Generales de Política Económica y el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación; es decir, contiene el combustible indispensable para echar a andar la maquinaria de los tres ordenes de gobierno (Federación, Estados y Municipios); cuya solvencia debe garantizar las elecciones, incluidos presupuestalmente el INE, el TRIFE, los treinta y dos organismos electorales correspondientes a igual número de entidades federativas, y tantos y tantas organismos y comisiones electorales que se les ocurran. Lo que significa para los hombres del gobierno del presente y del futuro inmediato, una gran tranquilidad económica y en su libertad personal; aunque difícilmente puedan lograr la tranquilidad que hasta hoy nadie ha logrado conocer y que se le identifica como “la tranquilidad de conciencia del hombre público”.

En Veracruz, durante un tiempo se escuchó como lema de campaña y en funciones de gobierno “vamos bien, pero viene lo mejor”. No vaya a ser que ahora se escuche por todo México “vamos mal, pero viene lo peor”. Lo anterior resulta, de las denuncias públicas de Animal Politico y Mexicanos Unidos contra la Corrupción, que pusieron en evidencia el desvío de siete mil seiscientos setenta millones de pesos, a través de once dependencias, esto solo en la revisión de la cuenta pública 2013-2014, donde aparece el uso indebido del gobierno federal, a través de once dependencias que sirvieron para la entrega de los miles de millones a ciento ochenta y seis empresas en total, de las cuales ciento veintiocho no debían recibir tal cantidad de recursos públicos que el Auditor Superior de la Federación Juan Manuel Portal, califica como “fraude” y en cuya confirmación y operación los copartícipes fueron: la titular de la Secretaría de Desarrollo Social Rosario Robles; el director de Banobras Alfredo del Mazo y el titular de Pemex Emilio Lozoya Austin (hoy acusado por la empresa brasileña Odebrecht, de haber recibido sobornos por más de diez millones de dólares, curiosamente durante el año de 2012 correspondiente a la elección presidencial anterior.

En la ESTAFA MAESTRA, participan graduados en desaparecer dinero público; y hasta dónde se sabe, ayudantes de esos graduados, sin mayor experiencia, fueron quienes implementaron la copia de la estafa maestra aplicada durante el sexenio anterior en el estado de Veracruz, utilizando las famosas empresas fantasmas, a diferencia de las utilizadas por los funcionarios federales, que entregaron el dinero a empresas que no daban los servicios contratados, para ir a parar, de los bancos a los bolsillos de los funcionarios.

Lo ocurrido fue descubierto al revisar la cuenta pública federal de 2013 y 2014; todavía faltan las revisiones minuciosas, con ojos de auditor, de los años 2015, 2016, 2017 y 2018.