Muy mal tomaron los organismos civiles y colectivos de búsqueda de desaparecidos el nombramiento “en lo oscurito” de Lorena del Carmen Mendoza Sánchez como titular de la Comisión Ejecutiva Estatal de Atención Integral a Víctimas.
Y es que mañosamente, como acostumbra, el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares esperó a que la persona propuesta por los colectivos, Arturo Márquez, anunciara que declinaba a su aspiración a encabezar la Comisión luego de casi tres meses de silencio del mandatario, a quien correspondía el nombramiento luego de que en la “productiva” LXIV Legislatura los diputados no fueron capaces de ponerse de acuerdo.
Apenas se dio a conocer que Márquez estaba fuera de la jugada, y Miyuli se sacó de la chistera el nombramiento de Lorena Mendoza, quien ha sido señalada como prepotente y absolutamente insensible para atender a las víctimas, luego de su paso por la Dirección de Atención a Mujeres, Grupos Vulnerables y Víctimas de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, a donde llegó durante el sexenio de Javier Duarte de Ochoa.
Ahora salen con que el “nombramiento” se realizó desde el 9 de septiembre, sin que nadie lo supiera hasta ahora. Muy ad hoc con las prácticas opacas de una administración a la que la rendición de cuentas le viene “guanga”.
Pero no sorprende el nombramiento. La nueva funcionaria cubre el perfil requerido para esa cartera por un gobierno como éste. Son la una para el otro.
