Hasta el momento, el Colegio Enrique Rébsamen, ha sido uno de los puntos más dolorosos que ha dejado el sismo ocurrido ayer, pues en este lugar ubicado al sur de la Ciudad de México, se ha confirmado la muerte de 21 niños y cuatro adultos, además de que todavía hay personas bajo los escombros.
Tras el colapso de una de sus naves, los voluntarios y personal de Ejército y Protección Civil han logrado el rescate de muchas personas, sin embargo, se presume que podría haber más decesos ante la dificultad de llegar al interior de los escombros.
Al lugar, han llegado cientos de voluntarios que se han organizado en diversas brigadas y han solicitado la entrega de víveres como agua, comida enlatada, y accesorios médicos.
En un recorrido realizado por el equipo de Ciro Gómez Leyva se pudo constatar que se ha vuelto complicado el tránsito vehicular y se observó que civiles han asumido en algunas zonas, estas labores.
Mientras tanto, el Sistema de Transporte Colectivo mantiene su servicio normal de las líneas 1 a la 9, aunque la marcha es lenta conforme avanza el día. Anoche todavía algunas tiendas de autoservicio y de conveniencia no estaban brindado servicio debido la falta de energía eléctrica.
En esta zona no hay energía eléctrica, aunque hay alumbrado público y en las zonas aledañas al edificio se ha publicado una lista de unas 30 personas desaparecidas, que se va tachando conforme las rescatan de entre las piedras.





