Autoridades del Condado de San Diego, en California, Estados Unidos, aprobaron ayer una resolución en contra del muro que quiere levantar el gobierno del presidente Donald Trump en la frontera con México, y cuyos prototipos podrían empezar a edificarse en las próximas dos semanas.
La iniciativa de la regidora demócrata Georgette Gómez hizo pública la oposición de una de las ciudades fronterizas más grandes del país a la propuesta del gobierno federal, ya que temen que tenga impactos negativos en materia económica y ambiental.
“Vamos a decirle al presidente (Donald) Trump que estamos rechazando el muro”, declaró Gómez.
“Esta es nuestra ciudad, tenemos que protegerla; es nuestra responsabilidad y creo que sí nos van a oír”, agregó.
Asimismo, cientos de personas, la mayoría integrantes de organismos civiles, se dieron cita en la sesión de cabildo y a fuera de la sede con pancartas en contra de la construcción del muro entre Estados Unidos y México.
