No aspiro al cargo de titular de la ASF como “trampolín”; busco ayudar a combatir la corrupción: René Mariani

El aspirante a la titularidad de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), René Mariani Ochoa, aseguró que no aspira al cargo como “trampolín”, lo que sí busca es ayudar a México en el abatimiento del cáncer de la corrupción.

Durante la entrevista que le realizaron los integrantes de la Comisión de Vigilancia de la ASF del Cámara de Diputados, propuso establecer un pacto antiimpunidad, pues ese es el gran problema del País, ese un dúo cancerígeno que padece México: la corrupción y la impunidad.

“Hablar de un pacto antiimpunidad diseñando un programa protector de denunciantes de actos deshonestos, plantear y -ustedes diputados- tienen esa facultad, normas penales precisas”, destacó quien fuera el contralor general del IMSS.

El fundador del Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS) de Veracruz, expresó que se siente muy orgulloso de haber nacido en esta tierra, pero aclaró de manera enfática, que presidió dicho ente fiscalizador, de 1998 a 2006.

“Soy responsable por ese lapso, pero no soy responsable de ningún día más. En ese momento me retiré de la administración pública para dedicarme a la investigación dentro de la fiscalización superior, la rendición de cuentas, la evaluación de los resultados y la transparencia”, subrayó.

Recordó que el ORFIS de Veracruz fue el primer estado en funciones plenas con un órgano de su tipo, incluso antes que la Federación y gracias a lo que se logró en ese momento, se le nombró vicepresidente del organismo nacional de entes fiscalizadores, que le otorgó, por primera vez, un premio nacional por el fortalecimiento a todos los programas de fiscalización.

Enfatizó que es necesario por parte de los legisladores, plantear normas penales precisas, rigurosas, altamente rigurosas para todos los “depredadores” de los recursos públicos, pero no crear nuevas leyes, sino cumplir las que ya existen.

Subrayó que los órganos de fiscalización son todos aquellos que reciben la rendición de cuentas, no sólo la Auditoría Superior de la Federación, no sólo la Secretaría de la Función Pública, a nivel estatal están las contralorías estatales, las secretarías de finanzas y administración como controladores.

“Por qué, porque se supone que hay control de los recursos público. Se debe fortalecer ese Sistema Nacional de Fiscalización que contempla la ley general al respecto en sus artículos 2 y 3, específicamente del Sistema Nacional Anticorrupción, para fortalecer la prevención, el control de los recursos y su evaluación”, aseveró.

Dijo que en Veracruz también se pueden hacer las cosas bien y es que recordó, durante su periodo como fundador y auditor superior del ORFIS, logró grandes ahorros presupuestales dentro del gasto público, para construir la sede del órgano fiscalizador que hoy permanece.

Además, recordó que durante su periodo se establecieron las auditorías técnicas a las obras y es que no todas tienen que ser de escritorio, sino que hay a hacer las revisiones correspondientes, “hacer tiros de precisión” y en ese sentido, dijo que se pueden hacer esos tiros de precisión en obras que se llevan a cabo al día de hoy como el aeropuerto de la Ciudad de México y el tren elevado de Toluca.

Propone incluir al SAT en el comité de la ASF y dotar de dientes fuertes al ente fiscalizador

De esta manera, durante la primera parte de su exposición, propuso a los diputados, incorporar al comité coordinador de la ASF al Servicio de Administración Tributaria (SAT) para que se le dotar dar “dientes fuertes” en la detección oportuna de fraudes y desvíos de recursos a través de unidades de inteligencia patrimonial para dar seguimiento a las declaraciones patrimoniales.

El contador público manifestó que espera que el Sistema Nacional Anticorrupción y el Sistema Nacional de Fiscalización no vayan a quedaren tinta y papel.

Opinó que se deben sumar los esfuerzos de los tres niveles de gobierno con los órganos de fiscalización correspondientes.

El contador público y profesor del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), entre otras reconocidas instituciones de educación superior, propuso también hacer una alianza con la ANUIES a efecto de hacer realidad, en todas partes, el servicio social en las carreras que son afines a la fiscalización.

Sobre la idoneidad, requisito primordial para ocupar el cargo, el veracruzano recordó que su trayectoria profesional cumple cabalmente con los artículos 95 y 88 de la Ley de Fiscalización.

“Soy producto de la cultura del esfuerzo. Empecé a trabajar a los 17 años para pagar mi carrera de contador público y auditor en el ITAM, hice una maestría en Administración, posteriormente un doctorado en Administración Pública y tengo la satisfacción de ser autor y coautor de 14 libros. En mis 40 años de docencia e investigación he estado en las principales universidades públicas del país y privadas: la UNAM, el ITAM y en mi tierra, la Universidad Veracruzana”, resaltó.

Destacó que es fundador del Programa Nacional de Investigación y Rendición de Cuentas y Combate a la Corrupción del CIDE y CONACYT.