Violencia contra periodistas: todo sigue igual

El asesinato del reportero Gumaro Pérez este martes en Acayucan es prueba fehaciente del fracaso de la “estrategia” de seguridad del gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares.

Nada ha cambiado en Veracruz con la alternancia. A pesar de las promesas hechas en campaña, permanece la misma violencia contra los periodistas que existía en el sexenio de Javier Duarte de Ochoa. Y no es cuestión de percepción. Las cifras no engañan.

En un año de la gestión de Yunes Linares han sido asesinados cuatro reporteros en territorio veracruzano: Ricardo Monlui en Yanga, Cándido Ríos en Hueyapan de Ocampo, Edwin Rivera Paz y Gumaro Pérez en Acayucan. Cuatro en un solo año. Un promedio casi igual que el de la administración anterior.

Y ahora como antes, la respuesta estatal es timorata, light. Lamentos para cumplir con la formalidad. Promesas de que se hará “justicia”.

Al cabo que prometer no empobrece.