Arturo Mattiello Canales, presidente de Comunidades Seguras, adjudicó el hallazgo en Xalapa de nueve cuerpos desmembrados, a un problema entre pandillas que trabajan para los cárteles.
«Esa es una guerra de pandillas porque se les dejó en total libertad, entre comillas, o sea no se les puso atención (…) no son cárteles, son pandillas que trabajan para cárteles».
Reconoció que las pandillas pasaron de graffitear paredes a desmembrar rivales.
Afirmó que los pandilleros de hoy en día son capaces de descuartizar a nueve personas como ocurrió el pasado fin de semana, pues se trata de sujetos sin compasión y con comportamientos psicópatas.
Indicó que la capital del estado de Veracruz está dominada por pandilleros. Es una de las las 10 ciudades del país que tiene el mayor número de bandas de ese tipo, pues así lo señalan las cifras del Colegio de México.
Detalló que Acapulco, Cancún y Xalapa son las tres ciudades con mayor presencia de pandillas.
«El crimen organizado en México en este momento son grupos de pandillas que se configuran en minicárteles y que después se alían con otros minicárteles y generan grandes cárteles que después de un tiempo se vuelven a desbaratar, a descomponer y generan nuevas figuras delincuenciales».
Aseveró que las bandas cambian de nombre, se integran y desintegran a cada rato, por lo que es difícil identificarlas.
Comentó que el problema no se resolverá con mayor presencia de elementos de seguridad. La solución está en la prevención y combate desde la raíz, es decir, atender la causa y no la consecuencia, afirmó.
«El fuego no se combate con fuego, entonces necesitamos aplicar otras estrategias, necesitamos calmar a la sociedad».




