En las últimas dos pasadas administraciones estatales, se incrementó tres veces más el número de concesiones otorgadas para otorgar el servicio de transporte público en Veracruz, así lo dió a conocer Miguel Ángel Yunes Linares.
De 33 mil 790 concesiones otorgadas hace 12 años, al finalizar la administración de Javier Duarte el número alcanzaba ya los 103 mil 611 permisos, es decir hubo un incremento de 69 mil 281 concesiones otorgadas de manera irregular según lo señalado por el gobernador.
“Esta es una evidencia de la corrupción y deterioro del servicio que se derivó no de la necesidad de mayores vehículo del transporte público, sino de otros tipos de interés y no precisamente legales”, puntualizó.
Estas unidades fueron utilizadas, en algunos casos, para cometer delitos como el robo de gasolina, de vehículos, para cometer secuestros, abigeato o bien, eran usadas como unidades de “alconeo” por parte de la delincuencia organizada.
El gobernador señaló que tan solo en los últimos 107 días del gobierno de Javier Duarte se autorizaron 6 mil 625 concesiones, sin embargo fue durante el último día de gobierno a cargo de Flavino Ríos, cuando se observó a mayor detalle la irregularidad en la expedición de estos permisos.
“El 30 de noviembre del 2016, siendo gobernador interino Flavino Ríos Alvarado, se autorizaron 2 mil 527 concesiones, por cada hora laborable emitieron 252 concesiones, por cada minuto del último día de gobierno se emitieron 4 concesiones, esto que nos quiere decir que las consecuencias era un negocio ilícito y era una de las fuentes de corrupción del gobierno anterior”, dijo.
Ante este panorama, se llevó a cabo el reordenamiento del transporte público en el estado, los concesionarios ya se encuentran en las últimas dos fases de este procedimiento.
Se logró empadronar 79 mil 682 vehículos, de los 103 mil 611 que permanecían registrados irregularmente en las oficinas del Transporte Público, es decir se depuró a todos aquellos que prestaban el servicio sin estar bajo el control del estado.
Fueron 33 mil 313 unidades no contaban con placas en la entidad, es decir el 42 por ciento de los vehículos del transporte público operan sin placas prestando sus servicios.