¡Segunda charla del peroteño con el primer priista en las últimas cinco semanas!
La moneda dejó de estar en el aire.
A la luz de los números, los reales; las posibilidades de llegar a la gubernatura, las reales, y el verdadero adversario a vencer, el también real, Morena, el aspirante José Francisco Yunes Zorrilla “¡Llámenme Pepe!”, habrá de decidir su futuro cuando este martes se entreviste en privado con el primer priista, Enrique Peña Nieto, en el marco de una visita relámpago a Perote.
El pretexto es la inauguración de una bodega de Liconsa en la comunidad de San Antonio Limón, más conocida como Totalco, bodega que se construyó hace más de cuatro años y opera con toda eficiencia,
La del presidente Peña con Pepe será la segunda charla que se suceda en las últimas semanas –la primera se dio la segunda semana de febrero- para hablar de lo mismo, el futuro del PRI en Veracruz.
El presidente de México tiene muy claro el escenario geopolítico de la república y el papel de Veracruz en la transición rumbo a la ratificación de la supremacía priista de cara a una inevitable alternancia.
La intención del aparato de poder será preservar su activo electoral como tercera reserva electoral.
Y en abono a lo mismo, las estadísticas, sondeos y encuestas –todo internos- arrojan una interesante luz de optimismo en favor de Pepe, quien luego de una intencionada precampaña discreta y sin mayor ruido y colocado en el segundo lugar de la preferencia ciudadana, se apresta a sacar sus mejores armas.
Serán las armas de la propuesta, del empleo, la seguridad pública, poner fin al analfabetismo, reestructurar la deuda pública y poner fin de una vez y para siempre la corrupción.
Nada sustentado en guerra de lodos o cajas chinas contra el adversario… al menos de su parte.
Así, el panorama político electoral de cara al derrumbe del PAN –el PRD no cuenta- y su candidato Ricardo Anaya prevén un efecto dominó en algunas de las 15 entidades que gobierna la ola azul.
Al mismo tiempo las condiciones favorables, para el caso de Veracruz, donde se observa el inminente el voto de castigo contra el gobierno de Miguel Angel Yunes Linares –que ya dio lo que tenía que dar- avizora una disputada final entre Cuitláhuac y Pepe.
Este martes pues, la historia de Veracruz habrá de reescribirse en el diálogo y negociación o en la ruda lucha voto por voto a sabiendas de la ventaja natural que lleva Pepe por su experiencia, conocimiento en el quehacer político, trabajo legislativo y de partido que pudiera representarle la diferencia entre la victoria y la derrota.
Una campaña nueva, con un equipo de campaña nuevo y, fundamentalmente, un proyecto de cambio son parte del ofrecimiento de Yunes Zorrilla.
En igual proporción se muestra Cuitláhuac García, quien adelanta 10 nuevos centros de educación superior, desterrar la corrupción y regresar la paz social a los veracruzanos una vez que sea gobernador.
Dos propuestas y un escenario en donde el respetable tiene la palabra.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo