Docentes en Xalapa advirtieron que la modificación de la malla curricular que se aplicará con la sustitución de la Licenciatura de Educación Especial por la de Educación Inclusiva en la Benemérita Escuela Normal Veracruzana “Enrique C. Rébsamen” como lo dispuso la Dirección General de Educación Superior para Profesionales de la Educación (DGSPE) reducirá los contenidos pedagógicos para los normalistas que estudian esta licenciatura, así como los espacios pedagógicos para los niños con alguna discapacidad que estudien en escuelas regulares, pues se limita a incluir al lenguaje de señas como una de las únicas enseñanzas cuando la necesidad para educar a los niños con discapacidad es mayor.
La maestra María Guadalupe Velasco Estrada, especialista en audición y lenguaje con experiencia de más de 40 años en esta área, dijo que debe evitarse que se implemente el nuevo plan de estudios a partir de septiembre de este año y se aplace la Reforma Curricular hasta el ciclo 2019-2010 porque debe analizarse que se está enfocando en gran medida al lenguaje, comunicación y matemáticas que, si bien es parte de la formación de los docentes, “no es suficiente para poder trabajar todo lo que requiere un niño antes de poder ser incluido en una escuela regular. Son muchas las estrategias que se tienen que trabajar con un chico que tiene una pérdida auditiva severa o profunda, que no tiene nada de lenguaje”.
Esta propuesta no considera además la inclusión social y laboral ni la diversidad cultural y lingüística en indígenas y migrantes.
Además, aseguran que se corre el riesgo de que la educación especial se privatice, ya que los padres de familia deberán buscar a especialistas en la atención de las diferentes discapacidades en instituciones no públicas.
“Lo que va a a pasar es que se privatiza la Educación Especial para los que tienen dinero y para los que no tienen dinero que son los más, se van a quedar sin atención en la escuela regular porque van a fracasar de inicio, antes de llegar se les va a negar el espacio”, advirtió la maestra Liliana Lucero Fernández.
De igual forma, se indignaron porque no fueron convocadas como expertas para el diseño curricular de este cambio en la licenciatura de Educación Especial.
“En este caso es impuesto. Nadie lo sabe ni qué enfoque ni qué metodología ni a quién estamos imitando”.