La protección de la salud, se ubica de manera especial en el conjunto de los Derechos Humanos, inherentes a toda persona, sin importar su raza o nacionalidad y en México se tutelan en los artículos 1 y 4 de la Constitución Política Federal, puesto que no se deja al criterio o libre albedrío de las autoridades, su protección resulta obligatoria; además de que se prohíbe tajantemente su restricción.
En el primer precepto constitucional, la obligación de la autoridad competente en el ramo de la salud pública, obliga a los funcionarios públicos, a respetar, proteger y garantizar el Derecho a la Salud de toda persona que se encuentre dentro del territorio nacional, sin importar su calidad migratoria o su estatus, nacional o extranjero, puesto que al prohibir la Carta Magna todo tipo de discriminación, nadie puede segregar al ser humano, por su origen étnico o nacional, por razón de género, edad, discapacidad o condición social, religión, preferencia sexual o estado civil, ya que en un plano superior permanece la dignidad humana.
El Derecho a la Salud, considerado como Derecho Humano y Garantía Constitucional en favor de los gobernados, se rige por los principios de Universalidad, Independencia, Indivisibilidad y Progresividad; y por su parte, en el párrafo IV del artículo 4º de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, el texto es claro, al redactar: ““Toda persona tiene derecho a la salud. La Ley definirá las bases y modalidades para el acceso a los servicios de salud y establecerá la concurrencia de la Federación y las Entidades Federativas en materia de salubridad general, conforme a lo que dispone la Fracción XVI del artículo 73 de esta Constitución””.
Los Municipios, cumplen obligaciones específicas en favor de los gobernados y en materia de atención a la salud, según el contenido del artículo 115 constitucional, en la fracción III, otorgando servicios públicos que garanticen la salud pública, mediante el saneamiento integral de las aguas, lagunas, ríos o cualquier acuífero que se encuentre dentro del territorio municipal; así como suministrando del agua potable, drenaje, alcantarillado, tratamiento de las aguas residuales, cuidando el medio ambiente sano en beneficios de la población.
La limpia pública integral, los mercados, panteones y rastros, también contribuyen al fortalecimiento de las condiciones de salud pública municipal.





