El que manda, manda y aunque AMLO no acepta objeciones a BARTLETT, debe saber que es de sabios equivocarse

Hace mil setecientos años, el poeta de la antigua Grecia, Hesíodo filósofo cuyo pensamiento interpretaba la realidad, aconsejaba para no equivocarse o tener que dar marcha atrás, en las decisiones importantes de la vida, acudir al consejo de otros, y hacer caso del “buen consejo”; de ahí surgió la expresión popular “es de sabios pedir consejos; pero es de más sabios pedir reconsejos”.

El nombramiento de Manuel Bartlett Díaz, como director de la CFE, generó un 91 por ciento de rechazo en menciones en redes sociales y plataformas digitales. El respeto a la dignidad con que se ha comportado el ING. CUAUHTÉMOC CARDENAS, quien fuera considerado el “campeón sin corona” desde el fraudulento resultado del conteo de votos en las elecciones presidenciales de 1988, obliga a los auténticos demócratas miembros del partido MORENA, a rechazar, cuestionar y protestar por ese nombramiento al Presidente electo.

En diversas columnas políticas y en múltiples mensajes a través de las redes sociales, la pregunta del día 29 de julio, fue ¿Dónde está el cambio que nos prometiste AMLO?, ya se te olvidó quien fue el autor y el responsable de la caída del Sistema que cambió el resultado del PREP y dio la victoria a quien considerabas o cuando menos, a quien nos hacías identificar como el Jefe de la Mafia del Poder, el expresidente Carlos Salinas de Gortari.

A ello se debe que los críticos del Presidente electo, hayan manifestado que seguramente el cambio prometido será “más de lo mismo” y que la tan traída y llevada Cuarta Transformación, solo fue un eslogan de campaña, para ganar votos de los indecisos, que aún siendo “antisistema” no estaban convencidos de votar por el lider de MORENA.

SI al rechazo Bartlett, se suma el cuestionamiento surgido por el posible nombramiento de Octavio Romero en la Dirección de Pemex, los planes y programas de gobierno que aseguraban una limpia en las dependencias oficiales más corruptas de los gobiernos del PRIAN, quedarán solo en buenas intenciones y los fraudes del Ing. Emilio Lozoya Austin, al frente de Pemex, y los sobornos multimillonarios que se presume recibió, de la empresa brasileña Odebrecht, ya desaparecieron ante la docilidad y complacencia o complicidad de quienes, sin ser nuestro candidato reconocemos que ganó contundentemente la elección y ahora podrá mandar, y si se equivoca, podrá volver a mandar hasta que termine su sexenio.