En la comuna de Sayula de Alemán todo era armonía, hasta que un buen día el alcalde perredista Freddy Ayala González, empeñado en cumplir con los sectores más desprotegidos, planteó a su síndica y regidores la urgente necesidad de reducirse los salarios y con ese recurso instituir un fondo de apoyo a la educación y a la nutrición de los infantes y ancianos.
-Hasta ahí llegó la concordia y fue cuando la marrana torció el rabo, dice en tono jocoso al columnista, el ex diputado local y ahora munícipe de la tierra del ex presidente Miguel Alemán Valdés.
A invitación expresa, acompañé a algunos recorridos de proselitismo a Ayala González quien integró una planilla plural, ofertando a los sayuleños un gobierno que impulsaría la modernidad, pero sobre todo la educación.
Una de las más entusiastas con esas propuestas era la síndica de origen panista Claudia Quiñones Garrido, lo lamentable es que tres meses después de haber tomado posesión, haya olvidado el compromiso público que en campaña suscribió, abrazando a todo lo que daba la propuesta de Ayala González de llevar la educación a todos los rincones de las 331 comunidades de Sayula de Alemán. Hoy sufre amnesia.
El gobierno municipal de Sayula de Alemán es fruto de una elección extraordinaria, tras el cochinero electoral del proceso ordinario del 04 de junio de 2017, anulado meses después por el TRIFE.
Ayala González, cuasi fundador del PRD en Veracruz hubo de aceptar alianzas y una de esas, fue con el ex candidato del PRI/PVEM, Héctor Velázquez Vázquez, quién al verse en desventaja por el desprestigio de su partido, no le quedó otra opción que sumarse, argumentando coincidir totalmente con la plataforma perredista. Ahora también le falla la memoria.
De los regidores segundo, Marcelino Morales Meléndez del PRI y tercera, María del Rosario Reyes Osorio, la sociedad sayuleña nada podría esperar, pues como la fábula del alacrán y la rana, su naturaleza se impone y aunque en el discurso sostienen estar al servicio de sus conciudadanos, en los hechos solo demuestran, estar en contra de todo y a favor de nada.
En todo este proceso, la única que ha sido congruente entre el decir y el hacer ha sido la regidora cuarta surgida del sol Azteca, Rosalinda Osorio Vidal, quien ha manifestado que si su salario es útil para el impulso a la educación, apoyaría a ojos cerrados el proyecto del alcalde.
Dos han sido los argumentos del munícipe de Sayula de Alemán para apostarle a la educación y al deporte: 1. Alejar a miles de jóvenes del vicio y de las redes de la delincuencia y 2. Prepararlos para los mega proyectos contemplados en la Zona Económica Especia del Istmo, en cuyo polígono está incluido aquél municipio.
Estas y otras razones han sido expuestas al cabildo por Ayala González, empero la síndica y tres regidores se ha montado en su macho y en una alianza venenosa, desde hace 48 horas han filtrado a redes sociales la perversa versión que el alcalde traicionó al gobernador Miguel Ángel Yunes, agregando que todo hace “suponer” que se sumará a las filas de Morena.
En relación al tema es preciso puntualizar: 1. Hasta donde se sabe Fredy Ayala ha sido perredista y si bien es cierto que su partido contribuyó al triunfo del actual gobernador, como alcalde en aras de obtener los mejores beneficios para su pueblo, en un marco institucional tiene la libertad para tocar puertas ante todas las instancias oficiales, concretamente ante la Cámara Alta y Baja, y 2. Por su tendencia izquierdista, suena lógico que se le vincule con decenas de liderazgos en Morena.
El endeble argumento de la síndica Claudia Quiñones en el sentido que la propuesta de reducción de salarios es una prueba de su simpatía por Morena, causa risa, porque si a esas vamos, el 17 de enero del año en curso el alcalde panista de Veracruz, Fernando Yunes anunció el reajuste de sueldos hasta en un 30 por ciento, para lograr un ahorro anual por el orden de los 42 millones de pesos ¿Y acaso por ello cometió un acto de traición a su padre por recurrir a la estrategia lopezobradorista de austeridad?
En su desesperación, los ediles inconformes difundieron un oficio girado al alcalde solicitando sesión ordinaria de cabildo para proponerle la remoción de la Secretaria del Ayuntamiento, Diana Jiménez.
Su pecado: haberles notificado que la sesión del pasado viernes sería a puertas abiertas y con la presencia de los medios de comunicación para tratar dos temas específicamente: Autorizar recibir en comodato una patrulla de policía y una ambulancia de traslados y de paso, proponer para una siguiente asamblea, modificaciones al presupuesto de egresos que incluiría una reducción al salario de todos los ediles.
Por cierto y esto pareciera ser una epidemia en los 212 ayuntamientos de Veracruz, síndicos y regidores les ha surgido el espíritu del contratista.
Por ejemplo si el alcalde es magnánimo y acepta incluir a sus recomendados en la asignación de obras, todo marcha sobre ruedas, pero si por el contrario el munícipe se opone en aras de transparentar su administración, de inmediato chilla la marrana.
¿Será acaso que en Sayula de Alemán el fondo de la confrontación de la síndico y regidores en contra el alcalde sea por el reparto del pastel? Pronto lo sabremos.