Separar la basura orgánica de la inorgánica permitía una reducción de los desechos sólidos urbanos que se generan en nuestros hogares, en un 30 o 40 por ciento, estimó el delegado de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), en Veracruz, José Antonio González Azuara.
Y es que según él, este tipo de residuos se pueden convertir en composta, beneficiando la producción de cultivos en las casas o el abono de las plantas que tengamos en nuestras viviendas.
“Si uno recoge todos los residuos orgánicos de casa, puede uno reducir el volumen por lo menos en un 30 o 40 % del volumen total”, destacó al apuntar que otras medidas podrían ser reutilizar el cartón, el celofán, el aluminio, envolturas para meterlas en envases de plástico y separar el PEP para hacer ‘ladrillos’.
En entrevista, dijo que la consciencia ambiental de reducir el consumo y reciclar ha ido en aumento, aunque falta trabajar más para educar y que la la basura orgánica se composte y se emplee en cultivos para autoconsumo o para las plantas de los parques de las ciudades.
González Azuara destacó que en el Ayuntamiento de Xalapa lleva a cabo un proyecto de composta con todos los desechos vegetales y frutales que se generan en la Central de Abastos.
“Vale la pena conocer esa experiencia, todo se está convirtiendo en tierra. Teocelo también tuvo un ejemplo fabuloso y en algunas casas, las personas ya le encontraron el secreto. El tema es cómo compostear”, abundó.
Al respecto, mencionó que muchas veces las personas desconocen el procedimiento y almacenan residuos de origen animal con aquella de origen vegetal y hojarasca, provocando fauna nociva, atrayendo roedores e insectos indeseables.
“Y ahorita les puedo asegurar que todos los centros de educación de la región, en todos los colegios de postgraduados y la Universidad Veracruzana tienen capacidad instalada para dar esta capacitación”, aseveró.
Al reiterar que actualmente el 80 por ciento de la basura está en condiciones de ser reciclada, añadió que el tema no es sólo económico y de inversión, sino de interés y consciencia ambiental.
“El trabajo se está haciendo con los colegios, con las universidades, con las escuelas, hay una gran difusión de la educación ambiental en el país y lo que queda es aprovechar esa capacidad que hay en el país
