Con el fin de prevenir que comerciantes abusen de la contingencia, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) mantiene presencia en 23 municipios de la entidad veracruzana que resultaron afectados por el frente frío 6.
El delegado de Profeco, Marcos Castillo López, refirió que personal de la dependencia se encarga de vigilar que los dueños de establecimientos comerciales no se aprovechen de la situación de las familias afectadas, para alterar los precios de productos necesarios como, por ejemplo, el agua embotellada.
Refirió que al momento hay recorridos por los municipios del sur del estado, para verificar y prevenir alza de precios injustificados, así como el acaparar u ocultar mercancías y artículos de primera necesidad que pudiera afectar a la población damnificada
«Que no haya incrementos injustificados en los precios y sobre todo que no se especule en el tema de que vaya a haber escasez de algún producto o que se almacene con intención de venderlo más caro más adelante».
Aseveró que al momento no se han detectado anomalías, pero la vigilancia se mantiene desde Los Tuxtlas hasta Coatzacoalcos y también en Tlacotalpan.
En caso de detectarse algún abuso, al establecimiento comercial se le aplicarían sanciones como la clausura del lugar, inmovilización de productos o multas económicas de hasta 2 millones de pesos.
