12 uvas, 12 magistrados

Fueron 433 los expedientes que se enviaron al Ejecutivo Estatal para que considere quiénes deben ocupar las 12 vacantes que como magistrados hay en el Poder Judicial. Del universo de documentación recopilada, 162 aspirantes son mujeres.

Y es que sin duda son de los puestos más cotizados y el sueño de muchos abogados: más de 7 millones de pesos al año y jugosas prestaciones, aunque el ciudadano de a pie poco entienda sobre su trabajo.

El funcionamiento del Poder Judicial se deposita en un Tribunal Superior de Justicia, en un Tribunal de lo Contencioso Administrativo, en un Tribunal de Conciliación y Arbitraje; así como en los Juzgados de Primera Instancia, Menores, Municipales, de Comunidad y en la Comisión Jurisdiccional de Menores Infractores.

Así, por si usted no lo sabía, la función de los magistrados es concurrir, participar y votar, cuando corresponda, en las sesiones a las que sean convocados por los presidentes de los órganos a los que pertenezcan; formular los proyectos de resolución de los expedientes que les sean turnados para tal efecto; discutir y votar los proyectos de resolución que sean sometidos a su consideración en las sesiones de sus correspondientes órganos.

Les toca también ordenar los engroses de los fallos aprobados; someter a la consideración de sus respectivos órganos, cuando proceda, la acumulación de las impugnaciones, así como la

procedencia de la conexidad, en los términos de las leyes aplicables; participar en los programas de actualización del Instituto de Capacitación del Poder Judicial del Estado; participar, previo consentimiento expreso, en los programas de visitas a los tribunales, juzgados y demás órganos del Poder Judicial, implementados por el Consejo de la Judicatura.

Se requiere de abogados por la argumentación jurídica, el conocimiento práctico de litigio en materia civil, fiscal, laboral, procesal, amparo, Derecho Constitucional y Administrativo, aunque algunos de los que se inscribieron, si bien son abogados, son neófitos de estos temas pues se han dedicado a la grilla.

Si bien en ningún caso podrá haber dos o más magistrados que sean parientes consanguíneos dentro del cuarto grado, hay un caso que se acoge a que si hubiere magistrados vinculados por parentesco de afinidad serán asignados a tribunales distintos, el de Juan Carlos Charleston Salinas, hermano del Presidente del Tribunal de Conciliación y Arbitraje.

Los 12 que resulten electos tendrán tranquilidad durante una década pues, como lo marca el artículo 4° de la Ley Orgánica del Poder Judicial, durarán en su cargo diez años improrrogables, salvo que durante ese lapso se ausenten de manera definitiva, dejen de cumplir con algunos de los requisitos para ser magistrado o se actualicen los supuestos previstos por esta Ley para el retiro forzoso.

Mucho se especula que ya hubo negociación política y que serán 2 priistas visibles a todas luces: Silvio Lagos Galindo, ex director de Asuntos Jurídicos del DIF con Rosa Borunda de Herrera y ex coordinador de la campaña a la gubernatura de Pepe Yunes y Tomás Carrillo Sánchez, subprocurador también en el sexenio de Fidel Herrera.

Burlando la supuesta autonomía de la que gozan los poderes 5 serán para morenistas, la gran mayoría desconocidos y el resto para quienes en verdad sí tengan carrera judicial.

En síntesis, que la renovación de los magistrados será más de lo mismo.

@YamiriRodríguez