Es bien sabido que en México existe la costumbre de vestir al niño Jesús para colocarlo en nacimientos durante fiestas decembrinas y al inicio del año.
Con el paso del tiempo se han añadido diversos accesorios, desde sillitas y collares hasta ropa interior y capas, dependiendo el uso.
Tomando esto en cuenta, las personas que se dedican al robo de gasolina, mejor conocidos como ‘huachicoleros’, decidieron crear su santo para que ‘alguien’ los respalde en sus actividades ilegales.
Así surgió el ‘Santo Niño Huachicol’, un niño similar al de Atocha pero en lugar de traer báculo y flores porta un bidón de gasolina y una manguera, las herramientas básica para realizar el hurto de combustible.
Los involucrados en la acción ilícita le rezan y piden evitar su detención al estar ‘ordeñando’ tomas clandestinas, evitar incendios y proteger a sus familias.
Como era de esperar, la imagen del Niño Huachicolero rápidamente se viralizó en Internet.