El alcalde de extracción panista, Abel Ramírez Coria, después de haber ganado la elección con un gran número de votos y teniendo la aceptación total de su pueblo, prometió una transformación para Paso de Ovejas, misma que a la fecha no ha llegado; al contrario, ha sido incapaz de cumplir sus promesas de campaña, y aunado a eso, ha hundido a ese municipio en inseguridad, desempleo y cero apoyo para el campo. Únicamente ha realizado obras sin trascendencia o incluso que han quedado en el olvido. En contraste, el munícipe y sus colaboradores llegan todos los días a Palacio Municipal en lujosas camionetas que son un insulto para el empobrecido pueblo.
Hay tanta inestabilidad en ese gobierno municipal que el Presidente Municipal ha cambiado a muchos funcionarios. A la fecha, ya lleva 5 secretarios del Ayuntamiento, 3 Contralores, 3 directores de Recursos Humanos, 2 directores de Protección Civil y 3 directores de Casa de Cultura. Y todo ello, por el carácter irascible y caprichoso del edil.
Y no sólo eso: Ramírez Coria siempre ha sido vinculado a grupos delictivos. Incluso, con frecuencia se ha visto involucrado en hechos de sangre. Por citar un ejemplo, en agosto del año pasado, un grupo armado irrumpió en la fiesta de cumpleaños del munícipe, con saldo de un muerto y varios heridos.
Hace unos meses, las ediles de su cabildo manifestaron su inconformidad en el Congreso Local; sin embargo, por estar al frente una administración panista no fueron escuchadas, y todo quedó en el olvido, pero las cuentas siguen sin estar claras, así como la actitud misógina del alcalde y la falta de atención a las peticiones ciudadanas. Sólo les dice a quienes buscan apoyo del Ayuntamiento que no hay recursos.
Vaya fichita que llegó al poder con el apoyo de Miguel Ángel Yunes Linares. A ver si el gobernador Cuitláhuac García Jiménez sigue solapando los desmanes de Ramírez Coria.





