Entre manifestaciones y porras, el presidente Andrés Manuel López Obrador, salió del museo naval de Veracruz donde esta mañana ofreció su conferencia matutina.
“¡Es un honor, estar con Obrador!”, exclamó un grupo de personas que buscaban llamar la atención del jefe del Ejecutivo Federal.
Y es que afuera del recinto, sobre la calle Esteban Morales del centro histórico de Veracruz, se dieron cita decenas de personas que querían hacerle alguna petición al tabasqueño.
Minutos antes de las 09:00 horas, López Obrador salió del museo y en lugar de abordar su camioneta, se dirigió hacia donde se encontraba el gentío.
Una valla metálica dividió a los manifestantes del primer mandatario. Los ciudadanos provenientes de la zona conurbada Veracruz-Boca del Río le entregaron un considerable número de documentos.
Llegaron algunos trabajadores de Tenaris Tamsa, ciudadanos que piden la salida de la empresa mixta Grupo Metropolitano de Agua y Saneamiento (MAS), familiares de personas desaparecidas y decenas de colonos que, entre otras cosas, piden servicios públicos para sus unidades habitacionales.
Casi 40 minutos duró el recorrido del presidente para saludar a los manifestantes y a quienes le pedían una fotografía o simplemente estrecharle la mano.
Cerca de las 09:38 horas, López Obrador abordó una camioneta que lo trasladó unas cuadras adelante, hasta el hotel Emporio, donde actualmente se hospeda.
