Hay que agradecer la «generosidad» de la directora del DIF estatal Verónica Aguilera Tapia quien publicitó en su cuenta de Twitter que la dependencia a su cargo donó una caja de medicamento a un joven enfermo de cáncer. Caray, no se vaya a quedar pobre doña Vero por tremendo acto de magnanimidad. Claro, todo tipo de ayuda por mínima que sea se agradece, pero ¿acaso era necesario cacarearlo en redes sociales. Vaya que la funcionaria anda en busca de reflectores para postularse como candidata a presidenta municipal por el Puerto de Veracruz.





