La vida por default

A unos la vida les da sorpresas y a otros les da en la ‘madre’
Supimos por medio de fotografías, que el líder de los diputados de Morena, Mario Delgado, acudió a realizarse un chequeo al hospital ABC, institución para los ricos de los ricos.
Antes, nos enteramos que el primer nieto del presidente López Obrador, vio la luz en un nosocomio de Houston. En ambos casos, las críticas ciudadanas, montándose en las fallas del INSABI, no se hicieron esperar, lo mínimo que les dijeron fue “¿%&#$” (traduzcan).
En realidad, en la enorme mayoría de los casos (salvo muy honrosas excepciones), la decisión sobre dónde acudir al médico o dónde estudiar (y en el resto de temas que involucren dinero), está vinculada a la capacidad económica, o sea, es por default.
Nadie en su sano juicio y con solvencia financiera, lleva a su hijo a que le den quimioterapia en una desbastecida clínica, si lo hacen es por necesidad.
Ni por error, un padre recomendaría a su vástago que ingrese a una ‘universidad’ patito si pudiera hacerlo en la UV, la UNAM o el IPN, lo hacen porque no tienen más remedio.
Por ello, el día que los gobernantes entiendan que no se trata de crear instituciones ‘piratas’ para salir del paso, sino organismos que dignifiquen el malvivir de millones de personas, podremos decir que este país se transformó.