Durante más de una década y tras gobiernos federales de tres partidos políticos distintos, la tala clandestina en las faldas del Pico de Orizaba alcanzó niveles inauditos en cuanto la corrupción y organización criminal, como en el impacto de la plataforma forestal de la montaña más alta de México, pero ni el Parque Nacional Pico de Orizaba, la CONAFOR, CONANP, PROFEPA, SEMARNAT y mucho menos las dependencias estatales de Veracruz y Puebla han algo al respecto con todo y sus facultades constitucionales y normativas para poner orden o en su caso exigir la presencia de las fuerzas federales, no ha pasado de tibias denuncias que se perdieron en las aguas de la corrupción.
El jueves pasado el exceso de la depredación como industria delictiva cobijada por supuestos explotadores autorizados que se apoyan en grupos con armas de grueso calibre, alcanzó el grado más alto de tensión del lado de veracruzano, en Calcahualco los pobladores no soportaron más y denunciaron las amenazas de los delincuentes que haciéndose pasar por elementos de la Guardia Nacional intervinieron predios para deforestarlos.
Para nadie es un secreto que los pobladores de las faldas del Pico cuentan con armas y que el nivel de tensión se mantiene con posibilidades de estallar en un conflicto que podría dejar saldos trágicos; ante la denuncia social y el respaldo de prestadores de servicios el tema escaló a medios estatales y nacionales ante el absoluto silencio de las autoridades que debían actuar.
La evidente negligencia de los responsables de la CONANP, Parque Nacional Pico de Orizaba y todas las del sector, el crepitar de la tensión social obligó al Gobierno de Veracruz a enviar patrullas de la Fuerza Civil para una verificación de rutina de la deforestación porque es obvio que los grupos armados no los iban a esperar.
La incipiente presencia de la autoridad estatal, no es suficiente para resolver el fondo del problema ya que se limitaron a un recorrido de reconocimiento y a dejar el número de emergencia por si regresan los grupos armados, es más esa Fuerza Civil no es de las confianzas de los pobladores, por antecedentes desagradables.
Mientras que los responsables de la protección y conservación de las áreas protegidas se mantienen agazapados se desconoce si esa actitud obedece al miedo o la complicidad con los depredadores de uno de los bosque más importante México, el que significa la fábrica de agua para buena parte de los estados de Puebla y Veracruz.
De manera directa corresponde a la Dirección del Parque Nacional Pico de Orizaba, que dependen de la Comisión Nacional de Areas Naturales Protegidas ofrecer una explicación creíble del uso de sus atribuciones, el número de denuncias interpuestas y el motivo de no dar seguimiento a las mismas, en función de que su deber legal es salvaguardar los recursos naturales que tiene asignado bajo su jurisdicción.
Máscara del PAN
El PAN desaprovechó la oportunidad de dar la cara para demostrar su fuerza opositora al gobierno de Andrés Manuel López Obrador, en vez de disfrazarse de sociedad civil, debió firmar la movilización del pasado vehicular del pasado sábado en algunas de las principales ciudades de México. En Veracruz la afluencia fue nutrida pero poco creíble que se tratará de una sociedad plural harta del gobierno.
En las calles de Xalapa, Veracruz y Orizaba por mencionar algunas, la protesta se consideró un éxito de convocatoria si se toma en cuenta que la pandemia ofrece, según las autoridades, su pico más álgido en lo que va de su presencia en el país.
La única exigencia fue la salida del Presidente, sin mayor argumento y en el confort de lujosas unidades, con simpatizantes del PAN y PRI al volante, lo que le restó seriedad como un movimiento de protesta con argumentos reales o bien un posicionamiento ideológico razonable, así la primera marcha anti AMLO, se perdió como oportunidad para expresar con argumentos una presunta política equivocada.
Si el PAN y sus aliados hubiesen tenido el valor de encabezar la marcha y arriesgar su poco prestigio social para reclamar con argumentos y causas la salida del Presidente, tal vez hubieran ganado el primer round rumbo a la elección intermedia.
