Pablo Jair Ortega / José Ortiz
Un ambiente de incertidumbre es el que se vive en Washington en la víspera de una de las elecciones más competidas por la Presidencia de los Estados Unidos.
“No hay nada para nadie”, dijo en exclusiva para Versiones.com.mx el prestigiado abogado Jorge Reyes Peralta, quien se encuentra en la Unión Americana como observador internacional de estos comicios.
Prácticamente, la Casa Blanca está blindada, refiere Reyes Peralta al señalar que han colocado a los alrededores mallas metálicas que impiden el acceso de periodistas y observadores electorales.
Sobre H Street hay un parque aledaño a la Casa Blanca, pero en donde antes era libre acceso, hay ahora una enorme reja metálica en la que activistas han colocado diversas consignas escritas. Una de ellas reza: “Black Lives Matters” (las vidas de los negros también importan).
Reyes Peralta añade que el “blindaje” también se extiende a hoteles y edificios cercanos a la Casa Blanca, en donde por primera vez colocaron en los accesos gigantescos tablones para proteger cristales y cerraduras.
Y es que –al decir- de Reyes Peralta, eso podría ser una señal de que se prevén disturbios ante una eventual elección muy cerrada, en la que se prevé que Donald Trump se autoproclame vencedor.
Es muy probable, además –vaticina el observador internacional- que esta elección se vaya a los tribunales, y ahí en esa instancia se decidan los resultados. En otras palabras, es posible que estas elecciones se judicialicen.
Comentó que es posible que mañana, entre 7 y 9 de la noche, tiempo de Estados Unidos –entre 18 y 20 horas, tiempo de México- comiencen a fluir las primeras tendencias electorales, pero los resultados preliminares –que no oficiales- podrían tardar varios días más, pues en algunos estados aún acostumbran emitir el voto vía correo tradicional.
