Yair Ademar Domínguez
Han mostrado PAN, PRI y PRD en Veracruz, su verdadero rostro, el rostro de los intereses personales, de la lucha del poder por el poder, de las camarillas, de las gavillas saqueadoras del presupuesto público, de la antigua visión política del “toma todo”.
Intentaron crear un bloque opositor para detener la Cuarta Transformación que está en marcha y se toparon con ellos mismos, con su naturaleza soberbia, necia, cínica, mentirosa y egoísta, como se han calificado. ¿Quién les cree? ¿Quién puede confiar en ellos? Aún no tienen en sus manos el pastel —y difícilmente lo tendrán— y ya se están peleando, arrebatando las rebanadas, a golpe tendido?
No han entendido que el pueblo no es un pastel, que el poder público no es para beneficio propio, que no se puede seguir lucrando con las necesidades de la gente, que la política es para servir, para atender a quienes más lo necesitan, para poner al pueblo en la cúspide de la pirámide, porque es el pueblo el que manda.
Vi ayer domingo a Sergio Cadena Martínez y a Marlon Ramírez Marín, dirigentes del PRD y del PRI, en una verdadera rabieta, lanzando pestes en contra del panista Joaquín Rosendo Guzmán Avilés. Lo llamaron “soberbio, necio, cínico, mentiroso y egoísta” y con esas palabras se proyectaron ellos mismos, líderes sin liderazgo, sin autoridad moral, cuestionados en su carrera política, por saqueadores y corruptos.
PAN y PRD ya se unieron en Veracruz para gobernar con Miguel Ángel Yunes Linares ¿y qué hicieron? Lo mejor que saben hacer, saquear. Las pruebas y los resultados están a la vista. PRI es un satélite del grupo Yunes-Linares-Márquez y su dirigente, a quien el PRD llamó “un gran líder” sólo obedece a los intereses de ese grupo asentado en Veracruz-Boca del Río.
Veracruz no se merece este espectáculo ni este tipo de líderes. Veracruz ya ha decidido y en Veracruz la Cuarta Transformación se consolidará en este proceso electoral con hombres y mujeres íntegros, que seguirán apuntalando los postulados que ya han demostrado resultados en todo el país, porque en el centro de nuestra política está el pueblo y los que más necesitan.
El Movimiento de Regeneración Nacional —y así lo señalan nuestros estatutos— busca la transformación democrática y pacífica del país. Ese es nuestro objetivo superior. Queremos en nuestro partido hombres y mujeres libres, decididos a combatir toda forma de opresión, injusticia, desigualdad, racismo, intolerancia, privilegio, exclusión y destrucción de las riquezas y el patrimonio de la nación.
En eso trabajamos todos los días en todo el territorio veracruzano. Buscamos la erradicación de la corrupción y los privilegios a que se han asociado de manera dominante los cargos públicos y la representación política y estamos dando batalla, sin tregua, por la conquista de una libertad verdadera, que sólo podrá ejercerse a plenitud cuando no exista el tráfico con el hambre y la pobreza del pueblo, que implique la compra de su voluntad.
Con esas ideas vamos caminando en este 2021 rumbo a la jornada electoral. Estamos conscientes de que el pueblo sabio nos respaldará nuevamente, porque el pueblo es nuestro camino y nuestra meta.
En el punto número 1 de nuestra Declaración de principios se indica que “El cambio verdadero del país comienza por cambiar la forma tradicional de intervenir en los asuntos públicos. La política no es asunto sólo de los políticos. El Movimiento concibe la política como una vocación de servicio, como un trabajo en favor de la colectividad, como una forma de servir a México. Es una responsabilidad y un compromiso con las aspiraciones democráticas y las causas del pueblo mexicano. Buscamos recuperar la política, hoy envilecida, como un instrumento de transformación de los ciudadanos, participando en los asuntos públicos”.
El Movimiento Regeneración Nacional surgió con el propósito de acabar con este sistema de oprobio, con la convicción de que sólo el pueblo puede salvar al pueblo y que sólo el pueblo organizado puede salvar a la nación. Esto sólo será posible con la participación política decidida de los ciudadanos, dotándola de una ética democrática y la vocación de servicio a los demás. Demostrando así, que hay más alegría en dar, que en recibir.
Con esta orientación, con esta guía, con esta luz ideológica vamos caminando. Los corruptos que muestren su verdadero rostro y que se sigan peleando. En tanto, nosotros seguimos trabajando por la gente y consolidando el proyecto de la Cuarta Transformación en Veracruz y en México.
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