A través de un un hilo publicado en Twitter, un médico investigador, identificado en la red social como Dr. Trebor, se dio a la tarea de demostrar, con fundamento y evidencia científica real, la toxicidad del dióxido de cloro.
El Dr. Trebor decidió aclarar el tema del uso del dióxido de cloro en pacientes COVID-19, luego de que un “doctor traumatólogo” difundió videos, audios y textos en el que defiende y promueve su empleo.
El médico señaló que dicho personaje se basa en un artículo publicado en la revista bioRxiv, la cual es “una especie de archivo para dar a conocer artículos de no ha sido revisado por un comité de expertos”.
Por otra parte, aclara que el modelo de estudio se basa en un embrión de pollo con el virus de la bronquitis infecciosa aviar (VBI) y “NO SARS-CoV-2, causante de la COVID-19“.
“Esto nos dice que están probando el dióxido de cloro en un animal filogenéticamente muy lejos del humano, para intentar eliminar un virus EXCLUSIVO de las aves. Dos principales puntos por lo que este estudio NO DEBE relacionarse con el humano ni con el SARS-CoV-2”, subraya.
Además subraya que, si bien los resultados del modelo de estudio apuntan que los embriones tratados con dióxido de cloro no murieron y el virus disminuyó, su seguimiento solo fue de siete días y al final fueron sacrificados los embriones, con lo que no se puede inferir si realmente no iban a morir con el dióxido de cloro.
Así mismo, los responsables del estudio destacaron que los niveles del virus atacado disminuyeron con el dióxido de cloro, pero por el “efecto desinfectante”. E incluyen que los embriones “casi” no tuvieron alteraciones; sin embargo, en ese “casi” entra nefrosis (daño al riñón) y atrofia duodenal”.
“Esto, señores, es un concepto por el cual giran todas estas falacias del dióxido de cloro. Los agentes desinfectantes sí eliminan virus y bacterias, pero eso no quiere decir que puedan ser usados en un organismo vivo; así como matan virus también sus células y de paso sus riñones”, resalta.
En resumen, explica, “es claro que esta ‘investigación’ no sustenta en NINGUNA forma el uso de dióxido de cloro en humanos como tratamiento de la COVID-19”.
Pese a su explicación, algunos internautas “desmintieron” al Dr. Trebor; entre los comentario a su hilo hay personas asegurando que han tomado dióxido de cloro durante cuatro años y cuentan con estupenda salud.
Otros señalan que en países como Hungría se usa el el dióxido de cloro de alta pureza desde hace 10 años, para atender diferentes enfermedades.
Con información de Radio Fórmula